Debido a los problemas burocráticos, la nómina
correspondiente al mes de enero se iba devengar a finales de
febrero, acumulándose junto con la de ese mes. Sin embargo,
se están realizando gestiones para que los trabajadores del
Plan de Empleo perciban un ‘adelanto’ a mediados del mes de
febrero, para no perjudicar las circunstancias económicas de
todos ellos.
En Melilla se ha desatado un malestar en este ámbito que
parece, según las noticias recogidas por este periódico, que
no será igual en Ceuta, ya que se han hecho gestiones para
hacer posible el adelanto de una nómina de las dos que iban
a acumularse para finales de febrero. Así, los trabajadores
percibirán la nómina de enero entre el 10 y el 12 de febrero
para aliviar la situación económica de quienes, una vez
contratados en los Planes de Empleo, han perdido el subsidio
que venían percibiendo y que, en el caso de retrasarse el
pago hasta finales de febrero, se verían en una situación
muy negativa y con los perjuicios de no contar con
percepciones económicas, hecho extremadamente grave por
tratarse de perceptores que antes estaban al borde de la
exclusión social y cobraban por el Plan Prepara 400 o 450
euros.
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La decisión paliativa intenta aliviar el perjuicio económico
a los trabajadores
Dicen que los trámites
burocráticos relacionados con la realización y gestión
nóminas son complejos. Sin embargo, los trabajadores de los
Planes de Empleo, no pueden ser las víctimas de una
situación sobrevenida a sus intereses de manera tan
negativa. Máxime cuando son gentes en precario, que estaban
al borde de la exclusión social, a quienes no les da igual
cobrar en una fecha que en otra. La frialdad burocrática no
va con ellos y, menos mal que han sido sensibles para
“adelantarles” lo que iban a cobrar doble a final de
febrero. Una razonable postura que alivia un trance
económico fundamental para los que menos dinero tienen. Al
menos, alguien parece haber reaccionado y ha pensado con la
cabeza... y el corazón.
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