O eso es lo que nos parece a
nosotros, cuando analizamos los hechos reales que se
producen un día sí y al otro también, en cualquiera de las
calles de Ceuta.
Y lo peor de todo es que siempre terminamos en lo mismo,
pero la solución no se da y dudo mucho que la vayamos a
tener, a pesar de todo lo que se anuncia y que debe quedar
muy bien, en los papeles, pero que difícilmente se traduce
en soluciones para la calle.
Y es que nos encontramos, con una más, otra acción que, por
sí misma, nos dice hasta donde ha llegado la seguridad en
Ceuta.
Veo en la prensa local, no en cualquier escrito que sea
contrario a la Ceuta de hoy, que un hombre ha sido golpeado
en la cabeza para robarle el móvil, en la calle Echegaray.
Aquí parece que vale todo y que no se mira por la vida y la
seguridad de las personas, que se ponen en peligro, incluso,
para hacerse algún “caco” con un simple teléfono móvil.
Parece que este ciudadano, de una mediana edad, permaneció
durante varios minutos, no sabemos cuantos, en estado de
inconsciencia, hasta que volvió en sí y pudo pedir ayuda en
la Delegación del Gobierno.
Una vez más, la situación se ha dado en el mismo centro de
la ciudad y a una hora prudencial, no a deshoras, pero para
quienes van en busca de lo que salga no hay horas, no hay
lugares y no hay edades a los que haya que respetar.
Y lo más sorprendente es que, tampoco hay soluciones de
ningún tipo que vayan a cortar, de raíz, hechos de este
tipo.
Además, y hay que notarlo, sólo parece que iba en busca del
teléfono móvil, algo que ya tiene todo el mundo y que se
puede adquirir desde cualquier precio. No lo entiendo. No
veo que sea tolerable que “cacos” de este tipo se vayan “de
rositas” y que todo quede en una denuncia, una más para los
archivos.
A este hombre, en el hospital, se le aplicaron 10 puntos de
sutura y ... a esperar, hasta que vuelva otro del mismo tipo
a atacarle, nuevamente.
El golpeo, parece que fue, con un objeto contundente, y digo
parece porque, a la hora que estoy escribiendo puede haber
sospechas, de quien podría ser el artífice, pero ninguna
realidad, que nos diga quien ha sido y a qué se dedica ese
sujeto.
Una vez interrogado por la Policía Nacional, el hombre que
había sido atacado lo único que parece que sabía era que le
habían golpeado, por detrás, y poco más.
La Policía Nacional, naturalmente, empezó por ahí, tras
haber sido llamada por los guardias civiles que estaban en
la Delegación del Gobierno.
Un caso más. Otro “incidente” en la Ceuta que vivimos hoy,
en pleno centro de la ciudad, no en cualquiera de las
barriadas que son tildadas de peligrosas y un caso más que
quedará en el susto de un ciudadano, en una denuncia en
Comisaría y en ..., poco más, porque luego viene lo
siguiente, y es que si se llega a detener al sujeto agresor,
en pocos minutos iba a estar en la calle para seguir su vida
normal, esto es, molestando a los demás.
Ni lo comprendo yo, ni lo comprende media Ceuta y los que
dicen que sí lo comprenden, desde luego, lo tienen que
rechazar. Ahora bien, lo más lamentable de todas estas cosas
está en que si uno deja mal aparcado su vehículo, en la
calle, a los diez minutos ya tiene la denuncia puesta,
mientras que esto otro no se resuelve. ¿No será que tenemos
una seguridad recaudadora?. Seguro que sí.
|