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Y cuanto antes mejor, las cámaras
de seguridad, en toda la ciudad, para borrar, de una vez por
todas, esa serie de manchas que se vienen dando en Ceuta y
que llegan a darse, a la misma cabecera del delegado del
Gobierno.
Digo que son necesarias y es urgente su instalación, pero al
llegar a este punto ya habrá división de opiniones –unos en
mi padre y los otros en mi madre- por lo que estoy diciendo,
agarrándose a ciertas libertades y a ciertos derechos de las
personas que no estén de acuerdo con esto.
Y aquí llega un punto crucial, al entrar en el capítulo de
los derechos, siempre tenemos la misma cantinela, los
derechos parece que existen sólo para unos, pero no suelen
tener cabida para los que salen con tranquilidad, actúan con
honradez y se comportan como gente de bien. Para estos los
derechos parece que se ignoran.
Y es que, a mí me importa un bledo que me estén filmando,
mientras voy por la calle, porque sabiendo que me están
filmando, como sabiendo que nadie me controla voy a seguir
haciendo lo mismo, no perjudicar ni dañar a nadie, ni nada
de lo que me vaya encontrando por la calle.
Por fin, por parte de la Ciudad y la Delegación del
Gobierno, han llegado a un acuerdo, y las dos
administraciones han retomado un proyecto que, en su día, no
llegó a ningún puerto, posiblemente, porque no se enfocara
con la seriedad y la serenidad que requiere una “obra” de
este tipo.
Nada, ni nadie, debiera salir al paso, o poner la zancadilla
a este proyecto de “incrementar, en la vía pública, los
niveles de seguridad”. Porque ya es hora de dar carpetazo a
una situación que parece de moda, desde hace varios meses y
que va haciendo de Ceuta una ciudad con muchas faltas de
seguridad.
Es la realidad, que se ha venido tapando, con frases tan
socorridas o manidas como “se trata de un hecho aislado”.
Aquí ya eso no se lo cree nadie, porque no se trata de un
hecho, son docenas de hechos. Aquí ya no es una barriada que
puede ser tildada de conflictiva, aquí se van dando y
repitiendo hechos, en cualquier parte, y eso ya necesita un
intento de solución definitiva y cuanto antes mejor.
Durante algunas semanas no podrán volver a reunirse el
presidente de la Ciudad y el delegado del Gobierno, por
cuestiones de salud del delegado, al que deseamos una rápida
recuperación, pero si, como se ha dicho, tras la reunión de
Juan Vivas y Francisco Antonio González, las dos
administraciones esperan tener redactado el proyecto de la
incrementación de los niveles de seguridad, en muy poco
tiempo, ya tendremos ganado algo y lo que hace falta, en
este proyecto que se va a acometer, es no caer en errores
pasados, por cuanto hay que recordar que hace unos años ya
se intentó esto y, al final, todo quedó en “agua de
borrajas” por zancadillas de fuera o por negligencias o
chapuzas de dentro.
Dos meses es lo que esperan en tener el proyecto en
condiciones y bien hecho, para que no se repita algo que
hace seis o siete años sucedió y que terminó con la retirada
de aquellas cámaras.
Los tiempos han pasado, de los errores se aprende y ahora
deben ir con la lección bien aprendida y mejor estudiada
para que ni desde dentro, ni mucho menos desde fuera, se
vuelva a romper algo que hace mucha falta.
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OPINIÓN / EL ESQUINAZO
