sociedad - JUEVES, 24 DE ENERO DE 2013

CEUTA
Tamara Crespo
ceuta@elpueblodeceuta.com

En su balance de la inmigración en 2012, la Asociación Pro Derechos Humanos de Andalucía (APDHA) constata el cambio en las rutas con partida desde el norte de Marruecos. Según sus datos, el volumen global de personas que han logrado atravesar la frontera sur y llegar a España es “similar” al de 2011, con casi 7.000, pero no sucede así con el destino. Mientras que en Ceuta el “blindaje” del Tarajal ha reducido las entradas, en Cádiz se han incrementado de forma notable.

En su balance de la inmigración del pasado año, la Asociación Pro Derechos Humanos de Andalucía (APDHA) constata el cambio que se ha registrado en las rutas con partida desde el norte de Marruecos. Según datos ofrecidos por la asociación en un comunicado de prensa, el volumen global de personas que han logrado atravesar la frontera sur y llegar a España es “similar” al de 2011, con casi 7.000, pero no sucede así con el destino.

En Andalucía se incrementa “notablemente” la llegada de inmigrantes a la provincia de Cádiz, mientras que desciende de forma ostensible la llegada a la provincia de Granada. Ello es debido, según la APDHA, “a la dificultad de encontrar neumáticas o pateras de cierta envergadura al margen de los pasadores”. “Pese a ser muchísimo más peligrosas e inestables, los migrantes atrapados en la zona de Tánger pueden acceder con más facilidad a balsas hinchables casi de juguetes, aunque para ello tengan que pagar precios desorbitados que pueden llegar a los 600 euros”, explican.

En el norte de Marruecos también se ha producido un cambio importante, ya que de acuerdo con las cifras de la ,asociación andaluza se han “duplicado” los migrantes que han logrado entrar en Melilla (2.105 frente a los 1.039 del año pasado) al tiempo que disminuían las entradas a Ceuta. Según la APDHA en la ciudad han entrado 756 inmigrantes en 2012 frente a los 1.258 el año pasado, aunque según las cifras oficiales, ofrecidas por EL PUEBLO el pasado 3 de enero, han sido 502 frente a 1.350, un 63% menos.

Estos cambios en Ceuta y Melilla están motivados entre otras circunstancias y tal como señalan desde la APDHA, por la proximidad de Melilla a la frontera argelina, donde, según organizaciones marroquíes han sido expulsadas al desierto más de 2.000 personas. Otro motivo es, afirman, “la creciente dificultad para circular por Marruecos” y, en el caso de Ceuta, el “blindaje” del paso del Tarajal por parte de Marruecos, que el año anterior “contempló a centenares de inmigrantes subsaharianos entrar a nado en Ceuta”.

También constantan el aumento de argelinos que han llegado tanto en Ceuta como, sobre todo, en Melilla, y las costas de Almería o Levante, que representan un 20% del total frente al 10% de 2011 .
 

La asociación cifra en 225 los muertos o desaparecidos en 2012

Por tercer año consecutivo ha vuelto a aumentar, según la Asociación Pro Derechos Humanos de Andalucía (APDHA), el número de personas muertas o desaparecidas cuando intentaban llegar a España. Según los datos del seguimiento que realiza esta organización se ha pasado de los 138 muertos o desaparecidos en 2010, a 198 en 2011, alcanzando los 225 en 2012. Estos son tan sólo de los datos que desde la APDHA han podido “contrastar”, afirman sus representantes. “No es ocioso el señalar, que aunque sea una coletilla, que la verdad de esta demencial escalada de personas que pierden la vida nunca se sabrá y será con toda seguridad mucho más elevada que los datos que proporcionamos”, apuntó Matilde Legborne, del área de Inmigración de la APDHA en una rueda de prensa que la asociación resumió en un comunicado.

Por su parte, Rafael Lara señaló que “la respuesta de la UE y de España sigue siendo la de enrocarse en sus miedos, haciendo más altos e inaccesibles los muros de la Europa fortaleza, externalizando la gestión de los flujos y haciendo del internamiento de inmigrantes el pivote la política migratoria”.

“Ejemplo de esto” es para la APDHA el presupuesto de 2013 que, “en plena vorágine de los recortes por la crisis, contempla una importante partida de 50 millones de euros para hacer frente a la llegada de inmigrantes irregulares”, entre ellos, 25 millones para repatriaciones forzosas y 4 para el reforzamiento de las fronteras de Ceuta y Melilla. “Las fronteras cerradas matan; llegando a nuestras costas, en otras fronteras europeas o atravesando el desierto del Sáhara”, concluyó por su parte Matilde Legborne.