Una vez pasadas las Fiestas
Navideñas y las celebraciones, que tanto nos desbordaron las
pasiones, me pongo a escribir unas lineas , que tantas idas
y venidas a mis ideas, se me olvidaba que me podía sentar a
escribir y compartir con todos vosotros unas cuantas
historias.
Siempre me dije y lo compartí, que si no trabajaba un cinco
de Enero, que bonito sería verme subido allí arriba en una
Cabalgata de Reyes Magos, y sentir la ilusión y el delirio
de mis paisanos, al verme pasar, y si en esas miradas
divinas y celestiales de niños y niñas angelicales, yo
pudiera contribuir con mi entusiasmo a repartir aparte de
caramelos, un puñado de ilusiones.
Mi nombre, estaba en la agenda, estaba en la lista,
interminable , porque Los Reyes están elegidos por sus
méritos y circunstancias hasta el año 2015.
Pero aquella mañana, extraña , triste e insípida por tantos
sinsabores que se fueron con el pasado año, encendiendo el
calentador, poniendo el café y viendo como estaba la red
social, que era mi ventana al exterior, y que decía, javier
urgente llamame... y acudí, a la llamada de Festejos, con
los nervios como la cita de un adolescente con su primer
amor, con los recuerdos y pucheros, porque como un regalo
caído del cielo, me sentía valorado y útil para la sociedad
y me encontré con un grupo maravilloso de gente conocida y
anónima dispuestos a conseguir a darlo todo.
Los maquillajes, los trajes, las babuchas, las idas y
venidas, los pasillos, los nervios y las llamadas a las
familias, como ¡ mamá, que soy paje del Rey Melchor ! ,
tantos nervios de mi madre Rosi, que le dijo a sus amigas,
mi hijo va de paje del Rey Baltasar.... tanto que le dije,
mamá, el Rey Baltasar y sus Pajes, son compañeros que están
alojados en el CETI y son Reyes de verdad, como se sintieron
por un día.
Y todos dispuestos a brindar a esta tierra Ceuta y su gente,
la mayor de los deseos e ilusiones, salimos a la puerta del
Tryp, grandes y pequeños, embelesados con esos saludos y
suspiros, se acababan , las baterias de los móviles y las
cámaras disparaban con locura, para recordar que allí
estaban los Reyes Magos con sus Pajes.
Ayuntamiento, recepción a niños y mayores, y esos detalles
de autentico Rey Melchor, por como solucionaba con los
chavales, las preguntas que le hacían y esos regates que nos
dejaba con la boca abierta a los pajes, los dos javis..
Y donde me vi desbordado por tanta alegría y desparpajo con
los niños y niñas con Sindrome de Down, que se hicieron
todos juntos con nosotros la foto, y me decía, como voy a
llorar si ellos, están llenos de felicidad, y por ellos
vamos a luchar.
La convivencia, los momentos, que ni nos conocíamos con los
atuendos de Oriente, las salidas en el coche y en los
furgones, la tristeza y la añoranza, en el encuentro en la
Residencia de Mayores, con tantos abuelos y abuelas, que vi
pasar por nuestras calles en momentos caballas, ¿ donde está
la tita Paca ?, a esa señora que está allí sentada, que le
has dado caramelos.... un cuarto de siglo, con su melena
plateada, me miraba , diciendo quien es ? si soy el hijo de
Rosi. CONTINUARA.
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