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El presidente de la Ciudad ha
vuelto a retierar la necesidad de que Ceuta tenga un
tratamiento “singular” en la UE en el próximo periodo
presupuestario que comprende desde 2014 a 2020. Las
reuniones en Madrid no sólo han servido para que el
Ejecutivo local insista en lo mismo porque Rajoy ya lo ha
anunciado por activa y por pasiva en alguna que otra
intervención: España va a luchar para que se reconozcan las
singularidades de Ceuta y Melilla. Es bueno en estos casos
‘dejar’ hacer al Gobierno central y no ‘machacar’ en demasía
con el asunto. También se ha anunciado, según la Ciudad, la
previsión de que desaparezca el Ipsi y el propósito de
“evitar el fraude” en los incentivos fiscales. A ver si hay
suerte en 2013.
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OPINIÓN / EDITORIAL
