Los miembros de la cofradía de la Amargura celebraron
ayer una oración de gracias con motivo del inicio, desde
hoy, de unas obras de acondicionamiento del local adquirido
por la cofradía y desde donde se tiene previsto realizar por
primera vez su salida procesional. Hay que recordar que esta
hermandad es la única que no tiene ningún lugar de salida y
con este local vería cumplido uno de sus grandes sueños.
La Hermanad de la Amargura va camino de hacer realidad uno
de sus grandes sueños, poseer una casa de hermandad de donde
poder realizar su salida procesional cada Miércoles Santo.
El hermano mayor de la citada hermandad, Raúl Moya, lo
confirmaba ayer a EL PUEBLO y aseguraba que este año la
imagen de Nuestra Señora de la Amargura y la de Nuestro
Padre Jesús Caído podrán salir desde su propia casa de
hermandad ya que la Cofradía ha adquirido un local el cual
adecentará en los próximos días con el objetivo de que ambos
titulares y por consiguiente el cortejo que lo acompañe
puedan iniciar la estación de penitencia desde la deseada
casa de hermandad, ya que hoy por hoy era la única Cofradía
que no poseía lugar propio desde donde iniciar su recorrido
procesional, habiéndolo realizado en los últimos años en la
Capilla de Madre de Dios de la Palma y la Catedral.
Raúl Moya adelantaba que las obras darán comienzo hoy y que
las mismas deberán estar concluídas entre el día 28 de
febrero y el 1 de marzo. Esta sería una primera fase de un
proyecto un poco más ambicioso. En esta primera fase tan
sólo se abordará el acondicionamiento del local adquirido
para poder realizar la salida procesional desde allí,
dotando a la Casa de Hermandad de dos grandes portalones,
uno principal y otro lateral, dos ventanas para la fachada
así como un balcón y finalmente un aseo. Tal y como
destacaba Moya, en la segunda parte del proyecto se tiene
previsto realizar en el interior una segunda planta donde
irían ubicados varios despachos, una sala de juntas así como
una sala para almacenar los enseres de los pasos.
El local cuenta con unos 115 metros cuadrados y con el fin
de que las obras discurran a buen ritmo, ayer se reunieron
los integrantes de la cofradía para celebrar una oración de
gracias a la espera de poder tener el local totalmente
adecentado para las fechas indicadas y poder proceder a la
bendición del mismo y así realizar, por primera vez, su
salida procesional desde su propia casa de hermandad, un
sueño siempre anhelado por los integrantes de esta cofradía.
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