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El juicio contra Addil A.A. como presunto autor del
tiroteo al ‘Vasco’ continuó ayer en la Sección Sexta de la
Audiencia Provincial de Cádiz en Ceuta con una sesión en la
que declararon dos sobrinos de la víctima. Ambos
coincidieron en apuntar al entorno de ‘Tafa Sodia’ como el
culpable del ataque, a pesar de que él ya estuvo imputado en
esta causa y se sobreseyó. A las puertas de la sala, la
víctima aguardó a que sus familiares declararán y prefirió
no entrar. El juicio continuará mañana con una última sesión
en la que declararán los médicos forenses y los expertos en
balística que analizaron los restos del tiroteo.
La acusación quiere demostrar en el juicio por el tiroteo a
Mohamed A.S., alias el ‘Vasco’ el 11 de julio de 2009, que
este ataque fue planeado por ‘Tafa Sodia’ y su banda. Para
ello, a lo largo de todas las declaraciones, la letrada de
la víctima ha insistido en conocer el origen de la enemistad
entre su cliente y el conocido como ‘Tafa Sodia’, y los
familiares del ‘Vasco’ han repetido en varias ocasiones que
este hombre les ha perseguido mientras que los miembros de
la banda estudiaban sus movimientos.
Durante la segunda sesión del juicio contra Addil A.A. por
un delito de homicidio en grado de tentativa contra el
‘Vasco’, el acusado pasó a un segundo plano sobre todo
durante la declaración del sobrino de la víctima, Mohamed
Laarbi A.L., quien ha sido condenado como autor de los
disparos al hermano de ‘Tafa Sodia’. Este testigo, propuesto
por la acusación, no pudo decir nada sobre el día de los
hechos ya que se encontraba preso por el tiroteo a
Abdelkader A.A., conocido como ‘Lolo’. Sin embargo, sí
explicó que el origen del enfrentamiento entre ambas
familias fue cuando su tío se enteró de que presuntamente
‘Tafa Sodia’ quería atentar contra él. Al igual que el
‘Vasco’ el día anterior, Mohamed Laarbi explicó a través de
una videoconferencia que Tafa le ofreció a su tío 10.000
euros para acabar con las denuncias cruzadas, pero que este
los rechazó. “Ahora Tafa ofrece 200.000 euros a quien me
mate en prisión”, denunció el testigo, que sobre el acusado
de este caso sólo dijo que lo conoce de la barriada y que
“es el chofer de la banda”. Mohamed Laarbi, visiblemente
alterado, aprovechó su comparecencia para asegurar que él
está preso “injustamente”.
Encuentro en la Almadraba
En esta segunda jornada también testificó otro sobrino del
‘Vasco’, Mohamed Said H.M. que sí afirmó haber visto al
acusado el día de los hechos a doscientos metros de donde se
encontraba su tío montándose en el coche BMW en el que le
dispararon. Sobre las 23.00 horas del 11 de julio de 2009,
Mohamed Said declaró que se encontraba circulando por la
zona del Ángulo en su vehículo, un Volkswagen Golf, cuando
vio a su tío en el Ángulo hablando con Mohamed Nayib M.M.,
que circulaba en el BMW. Según el testigo, el conductor
estaba convenciendo a su tío de que subiera al coche. La
misma versión que ofreció el ‘Vasco’ el lunes.
Mohamed Said señaló que doscientos metros más abajo, en
dirección hacia la mezquita, se encontraba el acusado con su
vehículo estacionado a la izquierda de la calzada y mirando
hacia abajo, es decir, en la misma dirección en la que
viajaba el sobrino del ‘Vasco’. Aún así, el testigo aseguró
que pudo ver a Addil dentro de un Audi TT y que el asiento
del copiloto estaba recostado. “Me llamó la atención porque
pertenece a la banda del Tafa”, afirmó Mohamed Said que,
aunque reconoció que sintió miedo, siguió adelante. El
sobrino de la víctima llegó a Sidi Embarek y decidió dar la
vuelta porque pensaba que “tramaban algo” contra su tío,
pero cuando llegó ya se había producido el tiroteo.
Más tarde, el testigo reconoció que se encontró con Addil en
la zona de la Almadraba. El sobrino de la víctima bajó del
coche y se dirigió hacia el Audi TT del acusado. “El me vio
y se fue, no me dio tiempo a hacer nada”, señaló para
aclarar que en ese momento lo vio con su novia. Tras estos
hechos, el procesado como presunto autor del tiroteo se
dirigió a la comisaría de Policía Local a denunciar que le
habían intentado agredir con una pistola y así lo relataron
los dos agentes locales que atendieron a Addil esa noche.
Los agentes se dirigieron junto a Addil al Hospital
Universitario y allí localizaron el Golf que el denunciante
les había descrito. En este momento, la Policía Local
registró ambos coches, ya que se les había avisado que
existía el indicio de que el autor de los disparos llevaba
una bufanda roja y azul. En el Audi TT encontraron una
bufanda del ‘Barça’ en el maletero. Sin embargo, ni la
víctima ni el testigo directo del tiroteo hicieron alusión
expresa a esta bufanda de un equipo de fútbol.
En la sesión de ayer también testificaron dos agentes de
Policía Nacional que acudieron al lugar de los hechos para
acordonar la zona. Por último, pasó ante el tribunal de la
Sección Sexta de la Audiencia Provincial de Cádiz en Ceuta
el hermano del acusado, F.M.A. para explicar como varios
hermanos de Addil cogían a menudo el vehículo incluso para
acudir a sus prácticas de tiro, ya que son militares. Estaba
previsto que ayer también declararan dos testigos
protegidos, pero no se logró localizarlos. La tercera y
última sesión de este juicio se celebrará mañana.
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