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Ahora empiezan otros
enfrentamientos, desde la Comunidad Autónoma de Cataluña, o
la Generalidad, que es el término que ellos usan. Me parece
muy bien.
Desde ahí, desde Cataluña y, especialmente, desde sus altas
esferas autonómicas, no van a parar de hacerse ver como
oposición clara y rotunda al resto de España, para así ir
tapando los mil desastres que vienen ocultando , muy
especialmente en su economía, algo de lo que no quieren que
se percaten sus conciudadanos, con lo que una tras otra irán
echando cortinas de humo.
La cosa está más que clara. Para ocultarlo, Arturo Mas quiso
echar una primera cortina de humo que tapara todo,
adelantando las elecciones y hablando de ese referéndum, que
nunca se dará, para poderse desgajar del resto de España.
Eso le salió mal, porque ganó las elecciones, pero en el
camino perdió más de una docena de escaños. Paso en falso.
Había que buscar algo más para seguir tapando “sus
vergüenzas”, y ese algo le viene al pelo, cuando Wert,
ministro de Educación, deja ver una parte muy importante de
su Ley de Educación, en donde el asunto de la inmersión
lingüística, su auténtico caballo de batalla, puede ser
clave para Cataluña, donde unos niños que vayan de Ávila,
Burgos, Albacete o Cáceres, quieran o no, tienen que recibir
la enseñanza en catalán, o lo que es lo mismo, allí que hay
dos lenguas co-oficiales arrinconan a la primera lengua del
país, para dejar todo el campo a la de esa autonomía.
Y mira por donde, Wert por ahí no parece que vaya a pasar,
cosa que aplaudo desde aquí, porque creo que los catalanes y
otras comunidades autonómicas que querían jugar con eso de
la doble lengua se han encontrado con la horma de un zapato
en el que no les cabe el pie.
Primero ha habido desplante de la consejera de Educación de
Cataluña, luego propaganda tirando de las figuras del equipo
de fútbol del Barcelona, así como todo lo demás que van a ir
sacando a escena, pero que no le va a frenar a Wert que,
según él mismo decía, hace un par de días:”está como un toro
bravo”, (no sé si era un nuevo mensaje para cosas futuras
sobre la prohibición de la fiesta de los toros en Cataluña),
pero sea como sea, lo que sí es cierto es que el ministro no
se “acongoja” y la Ley va a salir para adelante.
Es más, yo creo que puede ser una buena ley, mucho mejor,
por supuesto, que toda la sarta de estupideces que hemos ido
teniendo con el PSOE cuando ha mandado, y creo que será una
ley que intente solucionar un problema grave en Cataluña, lo
primero, y que intentará subir los niveles, que desde esa
tendencia a “egebeizar” la enseñanza, desde hace muchos
años, había ido evitando todo tipo de controles en la
educación, con lo que la calidad ha bajado a lo mínimo que
podríamos aspirar.
Y la Ley de Wert debe ir más lejos, y va a ir, estableciendo
un tronco común para todo el país, en el centro de lo cual
tendrá que estar la lengua oficial del Estado Español, o lo
que es lo mismo la Lengua Española, sin despreciar a las
otras lenguas que existan en algunas comunidades, pero
siendo la primera la Lengua Española.
Con esto, que no nos vengan con milongas, ni desde Cataluña,
ni desde el PSOE, porque Wert quiere poner orden en todos
los disparates que ha habido y que se han dado,
especialmente, en Cataluña, donde su historia se ha querido
enfrentar con la perspectiva de que el resto de España
siempre había ido contra ellos.
Espero que Wert no retroceda, “que se venga arriba”, como
los buenos toros de lidia y que esa ley comience a funcionar
cuanto antes mejor.
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OPINIÓN / EL ESQUINAZO
