El delegado del Gobierno en Melilla, Abdelmalik El
Barkani, justificó durante el transcurso de la jornada de
ayer jueves los mayores controles que se están realizando en
la frontera de Melilla por la necesidad de evitar la entrada
de inmigrantes ocultos en dobles fondos de vehículos. A este
respecto hay que resaltar que en declaraciones a los
periodistas tras participar en el acto de homenaje a la
Constitución, El Barkani ha defendido la necesidad de
mantener en todo momento la seguridad en los pasos
fronterizos, aunque eso vaya en detrimento de la fluidez del
tránsito.
Según ha explicado, el delegado del Gobierno en Melilla,
Abdelmalik El Barkani, se ha detectado un mayor número de
entradas de inmigrantes en dobles fondos de vehículos que
llegan a Melilla desde Marruecos, algo que hace
“absolutamente justificado” el control que se está
realizando.
“Es necesario mantener la funcionalidad de nuestra frontera,
pero evitando por supuesto la entrada irregular de
ciudadanos”, ha sostenido El Barkani.
Ha lamentado que esta circunstancia haga el paso menos
fluido, pero ha pedido comprensión dado que se trata de una
frontera internacional de la Unión Europea (UE)
Al hilo de esto, una vez más, el delegado del Gobierno ha
reclamado la mayor implicación del UE para resolver
cualquier problema que se produzca en los puesto
fronterizos, así como para la regulación de los flujos
migratorios.
Por otra parte, el delegado del Gobierno en Melilla,
Abdelmalik El Barkani, ha defendido este mediodía la total
vigencia de la Constitución Española, que hoy celebra su 34º
aniversario.
Tras asistir y participar en el acto que la Ciudad Autónoma
ha celebrado para conmemorar la fecha, El Barkani ha dejado
claro que, a pesar de que se puedan abrir debates sobre
modificaciones puntuales de la Carta Magna, lo cierto es que
en u totalidad, ha dicho, “sigue vigente”.
En este sentido, el delegado del Gobierno ha recordado que
este documento ha constituido en los últimos 34 años el
instrumento que ha permitido cambiar el ritmo del país,
ayudar a su desarrollo económico y social, y garantizar una
convivencia absoluta entre los españoles.
Por su parte, la Unión Federal de Policía cree que lo único
destacable del delegado del Gobierno es que recibe a los
sindicatos. El SUP prefiere esperar a que se repitan los
incidentes fronterizos para opinar.
“Unidad sindical sí, pero cada uno puede pastelear por su
cuenta”. Es lo que piensa el representante del Sindicato
Unificado de la Policía (SUP) sobre las alabanzas que el
pasado miércoles dedicó la Confederación Española de Policía
(CEP) a la gestión de la frontera que ha hecho el delegado
del Gobierno en Melilla, Abdelmalik El Barkani.
Si bien SUP, la Unión Federal de Policía (UFP) y la CEP se
han puesto de acuerdo para defender todos a una los derechos
de los agentes destinados en el perímetro fronterizo con
Marruecos, reclamar mejoras y soluciones para los
conflictos, otra cosa es lo que cada uno opina de la labor
de los políticos.
Para UFP, lo único destacable del delegado del Gobierno es
que “por lo menos” recibe a los representantes sindicales.
“A su antecesor le pedimos una entrevista y nunca nos
recibió”, apuntan a El Faro.
Por su parte, SUP, el sindicato mayoritario entre los
policías nacionales de la ciudad, apela a la prudencia antes
de pronunciarse sobre la gestión de El Barkani. “Nosotros
vamos a esperar pacientemente a que haya otro enfrentamiento
en la frontera y después vamos a hablar de lo que ha hecho
el delegado”, recalcó su portavoz.
Y por si no queda claro lo que piensa, va directo al grano.
“No estamos contentos en absoluto, pero no me interesa
hablar por ahora”, comentó a este periódico.
UFP no se anda por las ramas. “Si de lo que estamos hablando
es de mejoras en la frontera, está claro que no ha habido
ninguna. Aquello está ahora como estaba antes de que llegara
El Barkani. En agosto nos dijeron que había presupuesto para
mejorar infraestructuras y ya estamos en diciembre y no se
ha hecho nada”, acotó.
Y puso como ejemplo los pivotes que se colocaron por
seguridad para controlar los vehículos que entran en la zona
vigilada por la Guardia Civil y la Policía Nacional de la
frontera. “Están rotos desde que los pusieron cuando
empezaron los problemas con Chramti (el activista
antiespañol que lidera ataques con piedras y botellas a los
agentes de Beni Enzar)”.
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