Sin ningún género de dudas, ha
sido y creo que sigue siendo una marca sobresaliente en el
ambiente de la hostelería.
Paradores, especialmente desde que Manuel Fraga estuvo al
frente del Ministerio de Información y Turismo, se
distinguió por estar asentados en los lugares emblemáticos
de la localidad en la que se habían instalado, y si en algún
momento allí donde se iba a instalar un nuevo Parador de
Turismo no había lugares emblemáticos se buscaba la zona que
sobresaliera, por encima de todo y allí se instalaba, por
ejemplo en Cervera de Pisuerga.
Aun siendo así, la crisis ha podido con esta prestigiosa
marca y entramos en unos momentos en los que Paradores es
azotado con un ERE que dejará sin trabajo a 644 personas en
toda la red. No lo puedo entender.
La situación, que a nadie le quepa la menor duda, se
presenta muy grave, porque a los despidos estos hay que
añadir el cierre de una serie de paradores como los de
Albacete, Ferrol, Verín, Teruel, Ayamonte, Manzanares o
Puerto Lumbreras. Una auténtica atrocidad.
Algo inexplicable, como inexplicable es el que haya otros 27
de cierres por temporada, casos de Aiguablava, Almagro,
Alcañiz, Bielsa, Monforte de Lemos ... .
¿A dónde se quiere llegar?. Visto desde fuera es
inimaginable, visto desde dentro hay quien empieza a pensar
en que se quiere regularizar esto para luego “hacer dinero”,
esto es venderlo.
Sería una canallada y sería algo que no podríamos perdonar a
quienes no miran hacia donde, pero sí dan el recorte por
donde más daño van haciendo. Ya es lamentable que una
“empresa” estatal, o cercana a ello, sea la que sufra los
recortes que no se atreven a dar en otros tipos de
organizaciones.
¿Y Ceuta qué?. Pues como casi todos, tendrá que soportar, ya
veremos como, un recorte de 11 de sus 45 trabajadores.
No hay quien pueda aprobar esto, que vendrá dado por la
crisis que no tiene fronteras con nada, ni con nadie, pero
que aquí va a hacer mucho daño, en Ceuta y en todas las
demás partes que van a tener un cierre o unos recortes del
14%, algo exagerado.
Es cierto que aquí, en Ceuta, en la cafetería y el
restaurante se está a años luz de lo que fue hace 30 años,
pero no menos cierto es que en las negociaciones que vienen
ahora, los días 11, 18 y 27 de este mes, además del día 3 de
enero, habrá que analizar muy bien si no es preferible una
rebaja momentánea a un despido que luego ya no tendrá
solución alguna.
Desde siempre los ERES me han molestado, desde siempre he
entendido que proponer un ERE iba encaminado a dejar a gente
en la calle o a echarla con el menor coste posible para las
empresas. Paradores, santo y seña, de la hostelería no creo
que, a pesar de la crisis, sea la empresa que más problemas
tenga en este país, a no ser que las altas esferas, más que
profesionales, políticos, hayan estirado tanto la cuerda que
hayan quebrado la columna vertebral, como sólo lo saben
hacer los políticos y lo hicieron con varias cajas de
ahorros.
Ahora, el mejor aguinaldo para los empleados de Paradores es
que haya cordura en las negociaciones y que, al menos aquí,
en Ceuta, se eviten, a toda, costa los despidos. Eso, lo sé,
es muy complicado, pero para algo se va a negociar, porque
si ya de antemano está prefijado echar gente a la calle, lo
mejor es no establecer ninguna negociación.
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