El superintendente de la Policía
Local, Ángel Gómez, pide que se deje “andar” a la nueva
unidad de Proximidad y Atención al ciudadano, surgida de la
tan anunciada “reestructuración” del Cuerpo, antes de
criticarla. Es lo justo, pero Gómez ha de entender también
que, después de años y años anunciando la creación de este
servicio especializado, muchos no confíen ya en que llegue a
funcionar. Además, hay que tener en cuenta que muchas de las
labores que se atribuyen a esta policía de proximidad son ya
las propias de la Policía Local o municipal, como se conoce
en otras ciudades, por lo que es difícil entender que sea
necesario crear un servicio específico de “cercanía” al
ciudadano. Ahora cabe por tanto comprobar, y los vecinos
estarán muy atentos, la eficacia de esta medida.
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