La caída de precios de las gasolinas en noviembre ha hecho
que la inflación interanual haya bajado seis décimas este
mes, con lo que la tasa se ha situado en el 2,9%, un
descenso importante frente al dato del 3,5% registrado en
octubre. Según el indicador adelantado del índice de precios
de consumo (IPC) publicado ayer por el Instituto Nacional de
Estadística (INE), los precios de los carburantes y de los
lubricantes han provocado que el IPC rompiera la senda
alcista que registraba desde hace cuatro meses. Y es que el
precio de la gasolina bajó este mes un 8,41%, y el del
diesel un 5,46%, tras haber registrado máximos históricos en
septiembre, lo que hizo que el ministro de Industria, José
Manuel Soria, se reuniera con los máximos responsables de
las petroleras, Repsol, Cepsa y BP para pedirles que
contribuyeran a controlar la inflación.
Soria dijo en aquel momento que el sector debía “arrimar el
hombro” porque el IPC de noviembre constituía un elemento de
referencia para la revalorización de las pensiones. Algunos
analistas consultados por Efe creen que aquella reunión
surtió efecto y las petroleras tomaron nota con un descenso
de precios.
La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría,
anunció ayer que el Ejecutivo no compensará a los
pensionistas por la desviación del IPC en 2012.
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