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La Comisión de Accesibilidad, presidida por la consejera
de Fomento, celebró ayer una nueva reunión en la que, según
señaló la consejera Susana Román, se informó de la creación
de 11 de los 15 vados de reserva de aparcamiento para
personas discapacitadas o con movilidad reducida que se
solicitaron por parte de los organismos participantes.
Además, se dio cuenta de la situación del transporte público
adaptado y de la creación de la unidad técnica especializada
dentro de Procesa.
“Para que luego diga la oposición que no se hace nada en el
tema de la accesibilidad”. La consejera de Fomento, Susana
Román, expresaba ayer con estas palabras -con las que
recordaba que el tema salió a colación en el Pleno de la
Asamblea del miércoles-, su satisfacción por el
funcionamiento de la Comisión de Accesibilidad, para la que
ayer mismo había convocada una nueva reunión.
Esta comisión, presidida por la consejera y que se
“reactivó” el pasado mes de marzo, reúne además a
representantes del CERMI. Obimace e Imserso.
De acuerdo con el resumen realizado por Román, el primer
tema abordado en la reunión fue una “valoración” de los
transportes adaptados, que era una de las prioridades en la
agenda de trabajo de este organismo.
Además, se dio cuenta por parte de Fomento de la situación
de los vados en la ciudad y se informó de que de las 15
plazas adaptadas que se habían solicitado, han podido
habilitarse 11. “Las otras cuatro no han sido posibles por
razones técnicas”, manifestó la consejera.
Además de esto, se informó también de la puesta en marcha de
la Unidad Técnica de Accesibilidad que se ha creado en la
sociedad pública Procesa, que ha sido constituida a
peticición del Imserso, tal como recordó Román, y a la que
en breve se proporcionará un “listado” en el que se
especificarán las funciones que se le atribuyen.
Por parte de la empresa municipal Obimace, y tal como
informó el consejero de Medio Ambiente, servicios
Comunitarios y Barriadas, Gregorio García Castañeda, acudió
a la reunión uno de sus técnicos, especialista en
accesibilidad.
En lo que respecta al trabajo en este ámbito de Obimace y
siempre bajo la coordinación del área de Obras Públicas,
dependiente de Fomento, García Castañeda destacó que el
trabajo es “constante”, con medidas como el rebaje de los
pasos de cebra o la colocación de barandillas. Entre las
últimas obras realizadas para la mejora de la movilidad en
las calles de la ciudad se cuenta, explicó el consejero, un
“repaso” realizado en el Edificio Primavera, de Zurrón, y en
el Polígono.
El pasado 29 de marzo, el entonces consejero de Fomento,
Guillermo Martínez, dio a conocer cinco compromisos que la
Ciudad adquiría en materia de accesibilidad, comenzando por
el análisis de los “puntos negros”. La intención era conocer
qué lugares concretos no cumplen con las condiciones
necesarias para el tránsito de discapacitados físicos y
personas con movilidad reducida, para posteriormente “llevar
a cabo las reformas y adaptaciones necesarias”. De entrada,
el consejero se comprometió a crear 15 nuevos espacios de
aparcamiento reservados.
Junto a esto, se desarrollarían “iniciativas para difundir y
promover el cumplimiento” de la Ordenanza de Accesibilidad,
que data de 2003. Desde ese año, los establecimientos
comerciales deben cumplir con los requisitos para que puedan
ser utilizados por personas con movilidad reducida, pero las
licencias de apertura anteriores no contemplaban esta
obligatoriedad.
Un cuarto compromiso anunciado fue la creación de un sello o
símbolo para los establecimientos accesibles, con lo que se
pretende estimular la creación de estas condiciones en los
locales públicos.
El quinto compromiso era la puesta en marcha de campañas de
sensibilización dirigidas a las comunidades de propietarios
para difundir las novedades introducidas en la Ley de
Propiedad Horizontal.
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