Resaca de elecciones con
declaraciones fantasiosas de los enemigos de la democracia.
Cuando los españolitos de a pie entiendan el fondo de la
política actual, entiendan el trasfondo por donde se mueven
los políticos que no tienen poderes económicos al alcance de
la mano, se darán cuenta de lo que es en realidad este país.
Muchos poderes fácticos, que no fálicos, consiguen hacer
creer al pueblo lo que nunca ha sido ni es la realidad de
las cosas que pasan en el país desde que “aquellos padres”
de la Constitución realizaron esta chapuza legal que no
conduce a nada.
Por muy fervorosos que sean, por mucho amor que tengan al
conservadurismo... solo son simples ratas de las cloacas que
ensucian los que se creen amos del concierto económico
mundial. Pobres miopes que no ven más allá de la punta de
sus rojas narices, rojas de falsas emociones concebidas por
egoísmos exacerbados o... tal vez chupen miserablemente del
bote para beneficio propio por cualquier apaño que tengan.
El resultado de las elecciones en Catalunya dejan una cosa
muy clara: la mayoría del pueblo está a favor del
soberanismo, léase independencia, por cuanto el conjunto de
los votos así lo dice claramente.
Que Rajoy y compañía traten de hacernos creer que otro
sentimiento político les haya dado la razón es lo mismo que
hacernos creer que el país es una potencia petrolífera.
Que el líder de CiU no haya conseguido la meta que se
propuso de obtener una inmensa mayoría, debería ser un punto
de reflexión para los peperos.
Artur Mas ha sido castigado por el pueblo catalán por sus
recortes económicos y sociales más que por sus ansias de
independencia, que quede claro.
Si pensamos un poco veremos que las pretensiones de Mas no
han sufrido mermo alguno aunque no será el presidente de la
Generalitat, en funciones, quién lleve la medalla de héroe
independentista.
A los 50 votos de CiU se les deben sumar los 21 de ERC (como
una especie de travase de votos), los posibles 13 de ICV y
los 3 de CUP con lo que el tema de la independencia estará
refrendado por 87 votos contra los 48 del resto de partidos
políticos con representación en el Parlament Català (20 del
PSC,19 del PP y 9 de C,S).
A pesar de todo, siempre valdrán los de CiU y los de ERC. Ya
hacen por sí solos la mayoría necesaria.
Cierto es que ERC no confía en los convergentes pero una
buena lima, llamada autodeterminación, hará suavizar esas
asperezas ya que ambos partidos son de parecidas
características, aunque ERC no esté de acuerdo con los
recortes.
Así que menos echar las campanas al vuelo, por parte de los
peperos nacionalistas, y más trabajar por recuperar la
posición que tenía el país antes de que nos gobernaran los
mismos que ahora nos desgobiernan.
El triunfo de Artur Mas ha sido el de unir al pueblo catalán
por una causa común, lo que debería dar de pensar a los
detractores de la democracia, por cuanto la asistencia
masiva de votantes así lo demuestra.
Que el PP haya obtenido un voto más, en relación con los de
las pasadas elecciones, no significa absolutamente nada por
cuanto los electores que votaron a los socialistas,
amargados, variaron el sentido de su voto. Como prueba está
ahí el minipartido C’S (Ciudadanos – Partido de la
Ciudadanía) haya conseguido 9 votos, tratándose de un
partido que declara que solamente las personas tienen
derechos y no los territorios (?).
En fin, ya seguiremos mientras la vida sigue y yo también,
de momento.
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