En este sentido, la senadora por Ceuta que recientemente
fue designada por su partido, el Partido Popular, como
ponente para el debate sobre las relaciones de España y la
Unión Europea, además de viceportavoz en la Comisión de
Asuntos Exteriores, afirma que ”no se justifica un recorte
de 75.000 millones de euros, como plantea el presidente del
Consejero Europeo, cuando España está cumpliendo sus
compromisos con la UE y además está pagando ahora las
sanciones que se produjeron en la etapa socialista por
incumplimientos de sentencias judiciales”.
El Proyecto de Presupuestos Generales del Estado plantea
para el próximo ejercicio el aumento de la aportación
española al Presupuesto comunitario en dos puntos, ya que
pasaría del 5.84% al 7.85% Se trata del porcentaje de
participación previsto en el Fondo Europeo de Desarrollo
(FED). Un instrumento que supone la ayuda de Cooperación al
desarrollo comunitario que se presta a los Estados que
conforman Africa, Caribe y Pacífico, así como países y
Estados de ultramar. Un montante económico que va a
determinadas agendas.
En este sentido, la senadora por Ceuta que recientemente fue
designada por su partido, el Partido Popular, como ponente
para el debate sobre las relaciones de España y la Unión
Europea, además de viceportavoz en la Comisión de Asuntos
Exteriores, afirma que ”no se justifica un recorte de 75.000
millones de euros, como plantea el presidente del Consejero
Europeo, cuando España está cumpliendo sus compromisos con
la UE y además está pagando ahora las sanciones que se
produjeron en la etapa socialista por incumplimientos de
sentencias judiciales”.
“El Gobierno de la nación pondrá todos sus esfuerzos para
evitar este recorte que repercute en nuestra ciudad y en
esta lucha, estará el ministro de Asuntos Exteriores, García
Margallo y el secretario de Estado para la Unión Europea,
Méndez de Lugo”.
En estos momentos no se corresponde el esfuerzo que hace
España aportando más fondos a la Unión Europea con el
pretendido recorte, si bien la nueva asignación económica
con el aumento porcentual ya indicado responde al acuerdo
vigente de Cotonú de 17 de julio del año 2006 en el que se
estableció el 10º Fondo Europeo de Desarrollo y donde se
recogieron compromisos hasta el año 2013 a la vez que se
fija la contribución de cada Estado miembro en materia
presupuestaria.
La senadora por Ceuta, Luz Elena Sanín explica a este
periódico que “en las aportaciones de España a la Unión
Europea van incluidos los gastos inherentes a programas
comunitarios frente a los Estados miembros y los compromisos
contraídos con los demás Estados no miembros de la UE.
De cara a los Presupuestos Generales del Estado, el Grupo
Popular está a la espera de si se presentan o no enmiendas a
este capítulo de aportación española a los Presupuestos de
la UE. En el caso de que no se presentarán, no habría debate
y el trámite parlamentario sería rápido. En el caso de que
sí hubieran enmiendas de los grupos políticos, se enviarían
al Senado en donde se debatirían.
Según parece, España, por los acuerdos contraídos, no puede
incumplir el acuerdo ya pactado, como se ha dicho, en 2006.
Por ello, a nivel parlamentario se entiende que adquiere más
fuerza la protesta española de no aceptar “recortes”, máxime
cuando aporta más fondos que en ejercicios precedentes, lo
que le otorga un valor moral de reivindicación que habría de
ser aceptado. La parlamentaria ceutí, se mantiene en la
confianza que, como ya ha anticipado el presidente del
Gobierno español, Mariano Rajoy, España no acepta recortes
para Ceuta, Melilla y las islas Baleares y Canarias.
En la reivindicación, el Ejecutivo de la nación está
dispuesto a pelear esta cuestión, como ya abiertamente se ha
pronunciado el propio Rajoy.
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Más al Fondo Europeo de Desarrollo y “recortes” a España
A nivel parlamentario se va a
luchar. No cabe ninguna duda. Así lo afirmó Mariano Rajoy
este fin de semana y así lo expone la ponente en el debate
sobre las relaciones financieras de españa con la unión
Europea, Luz Elena Sanín. Quiere decirse que el Partido
Popular se vuelca abiertamente en la defensa de los
intereses de Ceuta, Melilla y las islas Baleares y Canarias.
Se trata de una apuesta que, abiertamente, ha sido pública y
que, como aquí recogemos, cuenta con la fuerza moral de los
hechos: en la anualidad en la que España aumenta
porcentualmente su aportación a la UE, no caben “recortes”,
ya que es un contrasentido que no se está dispuesto a
aceptar. Queda para ello la labor diplomática, la
negociación, para tratar de alcanzar un acuerdo.
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