El Teatro-Auditorio del Revellín fue ayer el escenario de
un acto solemne de carácter multicultural de hermanamiento
entre la Asociación Cultural Al Idrissi y la Comunidad Hindú
de Ceuta, con motivo del Año Nuevo Diwali 2.069 y el Nuevo
Año Islámico Hijra 1.434. Un espectáculo musical y de gran
contenido en las señas de identidad de Ceuta: la
convivencia.
Este primer festival de música sacra y devocional, tuvo al
portavoz de la Comunidad hindú, Praskash Ratan como
protagonista, así como el grupo musical Al Latissam de
Tanger y el coro de niños Azzohor del Centro Cultural Al
Idrissi, un elenco de 18 integrantes que atrajo la atención
del público.
La Fundación Vicente Ferrer también ha colaborado en este
evento con la intervención de su delegado en Andalucía,
Ceuta, Melilla y Extremadura, Rafael Carmona, quien se
refirió al hermanamiento y expuso la labor solidaria para
los más pobres en la India, proyectándose a tal efecto un
vídeo ilustrativo.
Allí se destacó que esta coincidencia del calendario en
cuanto al Año Nuevo de las dos Comunidades hermanadas es una
buena oportunidad para que los diferentes credos se unan y
compartan el sentido más profundo de cada una de las
conmemoraciones.
En Ceuta, cuna de sabios y ejemplo de convivencia, dió luz
el pasado año a la Asociación Cultural Al Idrissi con dos
objetivos: divulgación de la cultura musulmana a toda la
población de Ceuta desde el conocimiento del otro y a través
de sus diferentes manifestaciones culturales y fomentando el
entedimiento entre todas las culturas de nuestra ciudad,
construyendo así una convivencia pacífica y sin conflictos
sociales.Esta asociación transmite a sus alumnos valores de
convivencia desde la enseñanza y la cultura en su centro
cultural.
En esta ocasión y por primera vez, se celebró un acto de
esta envergadura entre una asociación musulmana y la
comunidad hindú, lo que es interpretado más allá del
concierto musical, como el comienzo de un auténtico
hermanamiento para caminar juntos hacia la riqueza
multicultural de Ceuta. La Comunidad Hindu de Ceuta, con 120
años de historia en nuestra ciudad, es un ejemplo vivo de
tolerancia y humildad, participando activamente en la
sociedad ceutí en todos sus actos y ceremonias. La
celebración del Diwali estos dias supone la necesidad del
hombre de avanzar hacia la verdad desde la ignorancia y la
infelicidad. Por ello, el canto devocional hindú “Allah
Bhajo Moulá Bhajo, He Allh Sai Bhagawan”, cuyo autor es el
mismo portavoz Praskash Ratan, dió lugar a una breve
explicación de éste al auditorio allí congregado, entre el
que se encontraba la Consejera de Educación, Cultura y
Mujer, mabel Deu.
Un vídeo sobre la labor en la India de la Fundación Vicente
Ferrer y la intervención de su representante en Andalucía,
Ceuta, Melilla y Extremadura, Rafael Carmona. A continuación
fue el grupo de fama internacional de Tanger, Al Intissar,
quien actuó tras aludir la pressentadora a la Hégira como el
comienzo de una nueva era para los musulmanes, quienes en
sus comienzos eran perseguidos en la Meca, siendo muy
significativo que en la raiz del Islam esté esa búsqueda de
horizonte amplios como signo de una vocación que se ha de
renovar y recuperar.
La Comunidad Musulmana a nivel mundial con 1.500 millones de
fieles, conmemora el comienzo del Año Nuevo de 1.434. Aunque
este día no tiene trasf ondo religioso, muchos musulmanes
aprovechan la fecha para recordar la vida del profeta
Mohamad, la paz y las bendiciones de Alah sean con él y la
Hégira o emigración que él hizo a la ciudad que hoy se
conoce como Medina. En este contexto explicativo, la
presentadora del acto celebrado anoche con gran solemnidad
en el Teatro-Auditorio del Revellín expresó que “la Hégira
es la firme decisión de no dejarse ahogar ni aplastar por
las circunstancias, pues el mundo de Dios es amplio y rico.
La Hégira nos enseña que el último profeta y los suyos no se
resignaron a ser víctimas, sino que abrieron puertas y
buscaron dejar de ser oprimidos y retornar al mundo. De esa
época data la primera constitución escrita conocida, la
Carta de Medina, sentando las bases jurídicas para una
sociedad en paz y progreso”.
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