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La presión de la inmigración clandestina continúa en el
perímetro fronterizo de Melilla, donde ayer se registró un
nuevo intento de entrada masiva abortado por las fuerzas de
seguridad marroquíes. Según datos de la Delegación del
Gobierno, el grupo estaba formado por unos 200 subsaharianos.
En el caso de Ceuta, la presión está siendo menor pues las
balsas que salen de Marruecos se dirigen a la península.
Las fuerzas de seguridad marroquíes abortaron ayer un
intento de entrada masivo de inmigrantes que pretendían
saltar a la valla de Melilla para acceder a territorio
español, un objetivo que finalmente no consiguió ningún
subsahariano. Según datos facilitados por la Delegación del
Gobierno melillense y recogidos por la agencia Efe, el grupo
de inmigrantes estaba formado por unas doscientas personas,
a pesar de que las primeras estimaciones policiales
apuntaban a una cifra mayor, en torno a las trescientas.
El acercamiento, sin que se llegara a tocar la valla, se
produjo sobre las 11.45 horas, por la zona próxima al cauce
del Río de Oro. Los agentes marroquíes lograron controlar y
repeler a los inmigrantes, por lo que las Fuerzas y Cuerpos
de Seguridad del Estado no tuvieron que intervenir.
No obstante, la Guardia Civil, alertada por el movimiento de
inmigrantes hacia la valla, ha establecido con carácter
preventivo una zona de seguridad extra en las inmediaciones
del perímetro, en colaboración con efectivos de la Policía
Nacional y agentes de la Policía Local.
Las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado se encuentran
en situación de máxima alerta ante la posibilidad de nuevos
asaltos, una circunstancia que no es nueva dada la presión
migratoria que está sufriendo Melilla desde hace meses.
En el caso de Ceuta, esta presión se ha desviado hacia el
Estrecho, pues si bien el pasado año fueron frecuentes las
avalanchas por el espigón fronterizo del Tarajal, Marruecos
ha reforzado la seguridad en este punto y también en la zona
fronteriza de la bahía norte. Los inmigrantes salen ahora de
puntos más alejados de las costas ceutíes a bordo de
pequeñas embarcaciones. Desde comienzos de año a Tarifa, han
llegado unos 900 inmigrantes, cifra que no se registraba
desde 2004 según datos Cruz Roja.
La excepción a lo habitual desde hace meses ocurrió el
pasado viernes cuando seis inmigrantes accedieron a Ceuta a
nado por el Tarajal.
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