Jóvenes Caballas (integrado por miembros del Partido
Socialista del Pueblo de Ceuta y de Unión Demócrata Ceutí)
se ha pronunciado en un comunicado de prensa aplaudiendo el
fallo del Tribunal Constitucional aprobando la legitimidad
de las personas homosexuales a contraer matrimonio. Y llegan
a acusar al Partido Popular de “pensamiento retrógrado y
claramente marcado por fundamentos religiosos”, como si a
éstos, a los fundamentos religiosos fueran ajenos no ya los
Jóvenes Caballas sino la propia coalición y en un ejercicio
de abstracción al absurdo se olvidan de algo incuestionable
para el colectivo musulmán que integra sus filas políticas:
la homosexualidad tradicionalmente está prohibida por la ley
islámica.
Quiere decirse por tanto que esta Coalición antinatura, de
un partido que se define como progresista de izquierdas como
el PSPC, bien poco puede hablar de “aires de libertad” con
este pronunciamiento judicial y aludir a las “vejaciones”
aguantadas y a las “personalidades religiosas” en referencia
a los matrimonios gay, cuando desde la UDCE, a no ser que se
haga un ejercicio de cinismo político y personal, ninguno de
sus integrantes, ni jóvenes ni viejos, pueden pronunciarse
de tal manera sobre “fundamentos religiosos” atribuidos al
PP, cuando en el mundo islámico se practica la tradicional
separación de sexos que han favorecido las prácticas
homosexuales aunque de forma clandestina y bajo un velo de
hipocresía. La misma que ahora exhiben con este
pronunciamiento conjunto con el PSPC que se define como
laico, algo que no puede decir la UDCE, donde la convicción
religiosa es indiscutible.
En Marruecos, donde más de un integrante de la UDCE tiene
familiares y amigos, la homosexualidad es considerada delito
desde 1.972, a causa de la influencia saudí. Además, por si
Jóvenes Caballas lo desconoce habrá que señalar que existe
un cierto consenso entre la mayoría de los juristas
islámicos en que la homosexualidad contraviene la Sharia o
ley islámica, considerándola no solo un pecado sino un
delito punible.
De manera que no se entienden esas imputaciones de Jóvenes
Caballas al Partido Popular cuando hablan de un paso hacia
“una verdadera libertad” y esos aires de tanta libertad de
la que hablan. ¿Desde el cinismo o desde la hipocreasía?
Recuérdese que la homosexualidad a nivel islámico va desde
la pena de muerte hasta una simple multa, latigazos o
encarcelamiento, ya que no existe un castigo específico
estipulado entre las distintas escuelas jurídicas y depende
de la discreción de las autoridades locales.
Quiere decirse que el manejo del PSPC en el seno de la UDCE,
convierte a la Coalición Caballas en una verdadera marioneta
política del partido de Juan Luis Aróstegui, llevándolo a
situaciones tan escabrosas como esta nota de prensa sobre la
homosexualidad que chirría en el ámbito musulmán, máxime
cuando se aboga desde el comunicado de Jóvenes Caballas a
“fundamentos religiosos” como si los coaligados del PSPC no
los tuvieran y a las “personalidades religiosas” (suponemos
que en referencia a las cristianas y no a las musulmanas)
como autores de las vejaciones que han aguantado los
homosexuales. ¿Y qué decir de la pérdida de la vida por ser
homosexual?¿Es una vejación o un crimen? ¿Quién considera
esta práctica abominable?
En ningún país musulmán del mundo hay leyes de unión
homosexual como tampoco para la adopción en homosexuales y a
excepción de Albania y Bosnia-Herzegovina, ningún país
islámico tiene ninguna ley contra la discriminación de los
homosexuales en su sociedad. ¿De qué aires de libertad habla
Jóvenes Caballas? ¿Piensa lo mismo la UDCE? ¿Suscribe el
partido de Mohamed Alí la postura del PSPC sobre la
aprobación legal del matrimonio gay?
A veces, ya se sabe, aquélla frase de que “la política hace
extraños compañeros de cama” y esta vez, el “matrimonio
político” PSPC-UDCE, trae estas consecuencias y desvaríos:
hablar de fundamentos religiosos y personalidades
religiosas, cuando el colectivo de la UDCE es más que
probable que no comparta esta línea del PSPC. Moraleja: la
UDCE es rehén del PSPC y éste se pronuncia con un desahogo
tan descarado sobre religión como si la coalición estuviera
plagada de laicos y no contara para nada la opinión o las
convicciones religiosas de los miembros de la UDCE. Por
favor, vamos a ser un poco serios y a no hacer el ridículo.
Mezclar religión y política es lo peor que le conviene al
PSPC estando donde está ubicado políticamente hablando.
Veremos a ver a donde les lleva esta unión ¿o matrimonio?
político antinatura. En este caso del matrimonio homosexual
a una interpretación cínica porque más del 50% de coalición
Caballas no debe estar, por sentido religioso, por secundar
las ideas del PSPC en este caso. ¿O si?
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