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La consejera de Asuntos Sociales, Rabea Mohamed,
respondió ayer a las criticas emitidas desde FEAPS en
relación al II Plan de Inclusión Social, un documento que
según esta entidad se había desarrollado “a sus espaldas”
pero del que Mohamed defendió su tramitación legal,
incluyendo un periodo de exposición pública de 30 días en el
que se podían haber presentado alegaciones.
Rabea Mohamed, consejera de Asuntos Sociales de la Ciudad
Autónoma, respondió ayer a las críticas de la Confederación
Española de Organizaciones en favor de las Personas con
Discapacidad Intelectual (FEAPS) tras la nota de prensa
emitida por esta última, criticando el procedimiento de
aprobación del II Plan de Inclusión de la ciudad.
“Creo que se han hecho un lío”, dijo la consejera, que quiso
distinguir entre el Plan de Inclusión Social y el Plan de
mediación familiar. Este último todavía no se ha llevado a
aprobación inicial y está todavía en Fiscalía para que se de
un primer repaso legal al reglamento. En cuanto al II Plan
de Inclusión, que sí está ya aprobado, la consejera recordó
que el ejecutivo ha seguido todos los trámites legales para
llegar a ponerlo en marcha. Esto incluye la exposición
pública del borrador durante 30 días para que tanto la
ciudadanía como cualquier entidad pudiera haber presentado
sus reclamaciones o propuestas. “Nosotros entregamos el
borrador en su día al CERMI, que es quien engloba a todas
las asociaciones de este tipo en al ciudad, pero nadie, en
ningún momento, presentó ninguna alegación”, dijo Mohamed.“En
ningún momento se ha querido hacer nada a espaldas de nadie
y creo que esto ha sido una confusión”, aseguró. FEAPS
remitió un comunicado de prensa en el que transmitía al
Gobierno las recomendaciones de la entidad para el
tratamiento y el desarrollo legal en relación a las personas
con discapacidad, un colectivo al que afecta directamente
cualquier reglamento de este tipo.
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