El personal sanitario del Ingesa se ha formado durante
dos días en la violencia de género vista desde una
perspectiva de atención sanitaria. Uno de los inconvenientes
detectados en Atención Primaria en el trato hacia las
mujeres que han sufrido este tipo de violencia es que las
consultas en los centros de salud deben ser demasiado
rápidas porque los médicos tienen muchos pacientes que
atender.
Una gran parte de los sanitarios pensaban que debían recibir
formación sobre cómo abordar los casos de violencia de
género. Así se dedujo de una encuesta realizada este pasado
verano entre los trabajadores de Atención Primaria y es por
ello que el Ingesa ha puesto en marcha una jornada de
conferencias sobre el tema, que se celebró ayer en el centro
de salud del Recinto.
La enfermera del servicio de Urgencias del Hospital
Universitario Ana María Ferrero Gallego explicó los recursos
que hay en Ceuta para las mujeres que sufren violencia de
género. Señala el poco tiempo que tienen para atender a cada
paciente como un inconveniente para abordar los casos de
violencia de género en la Atención Primaria. “Es uno de los
mejores sitios pero es difícil por el tiempo que tienen”,
señala. Por su parte, en cuanto a Atención Especializada, la
mayoría de los casos llegan por urgencias y si presenta
lesiones se informa en un parte médico. En el hospital se
detectan también casos -”cada vez más”- de mujeres
maltratadas procedentes de Marruecos. Además analizó cómo ha
evolucionado esta lacra social a lo largo de los años, así
como la evolución de la legislación y de la sanidad en estos
aspectos. “El hombre se ha sentido superior durante muchos
años y ha utilizado la violencia para demostrarlo”, apunta
la enfermera.
Por su parte, la psicóloga de la Unidad de Salud Mental del
Ingesa, Blanca Carolina Biondi Ortega, centró su
intervención en explicar las características del género. “Es
una categoría que se construye socialmente y, por lo tanto,
es modificable”, explicó.
La psicóloga definió la violencia de género como una
“relación desequilibrada de poder patriarcal del hombre
hacia la mujer”. “Los sanitarios en esos casos jugamos el
papel de recuperar la salud de la mujer afectada mediante
una actuación integral y coordinada y ayudamos en la
prevención”, explicó Biondi.
|