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El doctor Antonio González, médico del 061, explica en qué
consiste un atragantamiento y cómo actuar en caso de
presenciar o sufrir uno. Si la situación se complica es
necesario llamar al servicio de emergencias con rapidez,
pues puede provocar una parada respiratoria e incluso la
muerte. La maniobra de Heimlich es la técnica más utilizada
en personas adultos.
El doctor del servicio de emergencias de la ciudad, el 061,
Antonio González Muriana destaca la importancia de saber
actuar ante un atragantamiento, un hecho muy común frente al
que se puede salvar la vida si se dispone de unos
conocimientos básicos de actuación.
La maniobra a realizar en caso de atragamiento depende de
diferentes factores, entre ellos, si se trata de un
lactante, un niño o un adulto. En el caso de un niño mayor o
adulto, se deben realizar maniobras encaminadas a expulsar
el cuerpo extraño. Para ello depende si el paciente está o
no consciente y si la obstrucción de la vía es completa o
parcial.
En este último caso, el paciente suele presentar gran
agitación y una respiración dificultosa, y la persona que lo
acompaña debe animarle a toser. Cuando la obstrucción es
completa o el nivel de conciencia baja, es necesario actuar
con rapidez. Se debe inspeccionar la boca y faringe,
despejándola de cuerpos extraños mediante barridos con el
dedo para después realizar la maniobra de Heimlich.
Esta medida consiste en colocarse detrás de la persona y
abrazarla por debajo de los brazos. Se coloca el puño
cerrado cuatro dedos por encima del ombligo, justo en la
línea media del abdomen entre el ombligo y el final del
esternón. La otra mano se coloca sobre el puño cerrado. Se
reclina al atragantado hacia adelante y se efectúan cinco
compresiones hacia adentro y hacia arriba.
Embarazadas y bebés
En embarazadas y pacientes obesos, la maniobra se realiza de
manera similar pero comprimiendo sobre el torax, a nivel del
tercio inferior del esternón, por encima del apéndice
xifoides.
En el caso de que la persona esté inconsciente se actuará
como si se tratase de una parada cardiorespiratoria,
llamando al 061 y realizando una reanimación cardiopulmonar.
En el caso de lactantes o niños de corta edad, la maniobra
es diferente. Si el niño tose se le debe animar a que
continúe, sin hacer ninguna otra maniobra. No se debe
golpear la espalda ni intentar sacarle el cuerpo extraño de
la boca a ciegas.
Si la respiración es dificultosa se debe llamar al 061 y
actuar mientras tanto. Si el objeto está a la vista, se
extrae. Si no, se le puede dar cinco golpes en la parte alta
de la espalda con el talón de la mano, entre los omoplatos.
Posteriormente, si no se expulsa nada y el niño sigue con
problemas, se le debe dar la vuelta y realizar cinco
compresiones toráxicas en el centro del pecho.
Cuando la persona está sola, lo primero y más importante es
mantener la calma para así realizar la maniobra de
autoheimlich. Consiste en encontrar una superficie sobre la
que apoyar el abdomen para dejar caer el peso del cuerpo
sobre ella comprimiendo de esta manera el diafragma y
creando la misma tos artificial que crearía otra persona que
hiciera la maniobra sobre uno.
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