Dicen que no tienen donde aparcar los vehículos a
consecuencia de la obra de ampliación del Centro de Salud
del Tarajal, en cuyo espacio venían estacionando una
veintena de coches.Reclaman soluciones para evitar que,
mientras trabajan, sus vehículos sean multados por
estacionarlos en la puerta de su centro de trabajo al
dificultar el paso al autobús de la zona. Durante cinco
minutos han protestado simbólicamente por su situación.
Dicen que ya es la segunda vez en la que se ven afectados
por las multas de tráfico por estacionamiento de sus
vehículos en lugar prohibido: la puerta de su centro de
trabajo. En la primera ocasión, un pliego de descargo,
solucionó la cuestión, fórmula que también esperan que ahora
sea válida, si bien se quejan de la falta de garantías que
tienen para aparcar sus vehículos, una vez que perdieron el
espacio que venían ocupando con anterioridad: el recinto
donde actualmente se procede a la ampliación del Centro de
Salud del Tarajal.
Su situación se la expusieron en su día a los políticos y a
sus jefes médicos, pero no encontraron solución. Por ello,
ahora, Jacob Hachuel, que ha hecho de portavoz de los
concentrados dice: “Nos multan por venir a trabajar” se
lamenta y, alude a una serie de cuestiones derivadas de su
condición de funcionarios. “Se nos culpa de la actual crisis
económica y la soportamos como culpables, nos congelan el
sueldo, nos quitan las pagas y ahora, encima, por venir a
trabajar, pagamos”, en alusión a las multas que les han sido
impuestas. Se lamentan que no tienen donde aparcar los
coches, entre veinte y veinticinco vehículos y han
comprobado que la reunión que mantuvieron con el
Ayuntamiento, hace unos meses, no ha dado los resultados que
esperaban.
Este paro simbólico de cinco minutos pretende la búsqueda de
soluciones, que en algún caso, ya han apuntado ellos mismos
para buscar una salida a esta situación que les resulta
problemática y perjudicial. La mitad de la plantilla se
concentró en la puerta del Centro de Salud, ya que el resto
trabajaba con los pacientes.
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