Ceuta y Melilla han dejado la posición de cola del número de
jóvenes que abandonan la educación de forma temprana. Entre
2010 y 2011 casi un 8% más de ellos continuaron en algún
tipo de enseñanza formal en las ciudades autónomas, que
ahora tienen una tasa de abandono del 32,2% en vez del 40,7%
registrado un curso antes.
Ceuta y Melilla todavía están lejos de equipararse a la
media nacional de abandono escolar temprano, pero durante el
curso 2010-2011 se produjo una reducción cercana al 8% de
alumnos que dejaban los estudios entre los 18 y los 24 años
en ambas ciudades autónomas. La cifra exacta es de un 7,87%
menos de abandono en las dos localidades, que juntas sumaban
un abandono escolar del 40,7% en 2010 y durante 2011
consiguieron mejorar esta tasa hasta llegar al 32,2%, según
datos del Ministerio de Educación, que anualmente mide el
abandono educativo temprano por Comunidades Autónomas.
Para el director provincial de Educación en Ceuta, Cecilio
Gómez, no cabe duda de que es un dato positivo: “Nuestro
principal objetivo es mejorar y cualquier avance es un
éxito, porque quizá supone invertir la tendencia que tenemos
y comenzar a reducir el abandono”. Ahora bien, desde la
propia inspección de la Dirección provincial, recuerdan que
estos datos hay que tomarlos con mucha cautela y ni mucho
menos significan que los resultados sean buenos.
Así, aunque ahora Ceuta y Melilla han dejado la peor
posición entre las comunidades a Andalucía en relación al
abandono escolar, por unas décimas (Andalucía registra un
32,5% mientras Ceuta y Melilla tienen un 32,2%), ambas se
encuentran lejos de la media nacional, que según datos de la
Encuesta de la Población Activa del INE mejoró desde el
28,4% observado en 2010 al 26,5% en 2011. Si ampliamos el
marco de referencia a la Unión Europea, estos datos, si bien
mejoran respecto al curso anterior, todavía distan de ser
motivo de satisfación para el sistema educativo nacional,
criticado esta misma semana por la UNESCO en un estudio por
encabezar el fracaso escolar europeo. En su informe se
afirma que uno de cada tres jóvenes españoles de entre 15 y
24 años dejaron sus estudios antes de acabar la enseñanza
secundaria, frente a la media europea, donde o hace uno de
cada cinco.
|