El consejero de Economía, Hacienda y Recursos Humanos,
Guillermo Martínez, presentó ayer ante el Consejo de
Gobierno el informe de Tesorería correspondiente al mes de
septiembre y anunció que según las previsiones se cerrará el
ejercicio con superávit en las cuentas públicas. Además,
Martínez informó que durante septiembre se han pagado
facturas a proveedores por un valor de 11,5 millones de
euros.
Guillermo Martínez, en calidad de consejero de Hacienda, dio
cuenta ayer ante el Consejo de Gobierno sobre el informe de
Tesorería de la Administración local del mes de septiembre,
ya que es un compromiso del Gobierno y que además sirve para
cumplir con las exigencias de Madrid. El consejero, en rueda
de prensa después del Consejo de Gobierno, explicó como
portavoz que a 30 de septiembre, el estado de las
existencias en la caja pública era de 32,8 millones de
euros, de los cuáles “25,7 correspondían a las pólizas no
dispuestas, 3,5 de saldo disponible de préstamos en periodo
de carencia, y 3,6 dinero que estaba en cuentas corrientes a
favor de la Ciudad Autónoma”.
Asimismo, Martínez adelantó que las previsiones de tesorería
es que se acabe el año con unas existencias finales de 32,9
millones de euros en las cuentas públicas. Y es que, el
portavoz anunció que el pronóstico es finalizar el año con
superávit. El portavoz también explicó que a lo largo del
mes de septiembre “se han abonado facturas a proveedores por
un importe de 11,5 millones de euros y con ello supone que
en los primeros nueve meses del ejercicio se hayan abonado a
los proveedores locales 131,6 millones de euros, incluido
también la póliza del Instituto Nacional de Crédito”.
Martínez señaló que el estado de la Tesorería es “saludable”
y aseguró que se están afrontando los pagos a proveedores de
conformidad con la nómina y con “normalidad”. Aunque eso sí,
el consejero reconoció que existen deudas de tres y cuatro
meses con los grandes proveedores como Urbaser o la Empresa
de Alumbrado.
Martínez afirmó que, aunque se prevé acabar el año con
superávit, en estos momentos la deuda formal, aquella
correspodiente a las facturas presentadas y no abonadas,
asciende a 7,8 millones de euros.
El consejero también anunció que ayer se aprobaron en el
Consejo de Gobierno dos licencias de apertura para dos
cafeterías.
|