No sé si a partir de ahora voy a
coincidir muchas veces más en las opiniones con el ministro
de Educación, Wert, pero en lo que tengo que coincidir
perfectamente es en eso de que “hay que españolizar a los
alumnos catalanes”.
Aquí ha puesto el punto sobre las íes, ante el auténtico
escándalo que supone el que muchos alumnos, en Cataluña, por
querer hablar la lengua oficial del Estado sean
discriminados en una parte del Estado Español, que es
Cataluña.
Yo no sé si Wert es un hombre de partido, pero lo que sí ha
demostrado con esa frase es que es capaz de actuar de
palabra y de hecho frente a lo que otros considerarían
políticamente incorrecto.
Y nada más aparecer estas manifestaciones del ministro Wert,
desde el PSOE, como ya viene siendo habitual, aparecen las
primeras críticas, incluso pidiendo la dimisión del propio
ministro:¡¡Manda huevos!!.
A lo largo de muchos años, uno no sabe muy bien por donde va
o por donde quiere ir el PSOE que parece que le interesan
más los votos que la cordialidad y la realidad española.
El PSOE, con sus apreciaciones, acaba de dar un paso atrás o
un bandazo, a la derecha o a la izquierda, pero no un paso
hacia adelante en busca de la no resquebrajadura de lo que
es nuestro país, en todas sus dimensiones.
Y es que aquí el ministro se ha echado para adelante, ha ido
en la dirección que está marcando el PP y lo que hace falta
es que la Ley esta de Educación que él ha promovido vaya en
ese tono, en esa dirección, en busca de la igualdad y unión,
no en lo que otras tendencias van buscando.
Y es que ayer, por si no se sabía bien, se ha demostrado,
una vez más, con la manifestación en Barcelona, que hay un
grupo de separatistas, mientras que una gran mayoría fuera y
dentro de Cataluña rompe con esos intentos de separar lo que
tantos años ha estado unido y bien unido.
Con esta perspectiva queda claro que hay quien pretende que
Cataluña sea un polvorín, especialmente promovido por el
empuje de la corriente separatista.
El ministro Wert está al lado de todos en este aspecto,
porque sabe que los hijos de castellanos, extremeños,
andaluces,... están en inferioridad de condiciones si
perdura esto de educar tan sólo en catalán, contraviniendo a
la propia Constitución por la que todo español tiene la
obligación y el derecho de conocer perfectamente y usar la
lengua española.
El contrapunto a los separatistas o independentistas
catalanes se ha manifestado en la muestra esa de Barcelona,
a favor de la unidad de España.
La manifestación, en la Plaza de Cataluña, iba en una
dirección muy clara “a favor de una Cataluña española” y “en
contra de la independencia”.
Personas privadas de a pie, políticos y simpatizantes tanto
de España entera, como de Cataluña, han dejado claro el
sentir que quiere la mayor parte de la población.
Se puede ser, además de español, también, catalán, ambas
nociones caben en el mismo mapa político, pero para eso
tiene que haber buena voluntad desde el lado y la
perspectiva catalanista.
Todo esto, pues, Wert parece que lo quiere poner en orden,
en su sitio, empezando por la no discriminación por la
lengua.
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