La cantante ceutí Elsa Rovayo, más conocida como La Shica,
presentará el día 19 en el Auditorio del Revellín su disco ‘Supercop’,
su segundo y último trabajo. Flamenco y copla, hip-hop, rap,
rock, funk y hasta bossa nova dan forma al deseo de La Shica
de encontrar su propio sonido. La Consejería de Educación,
Cultura y Mujer pone a la venta mañana lunes en el Punto de
Información Cultura de Gran Vía las entradas.
La Consejería de Educación, Cultura y Mujer pone a la venta
mañana lunes en el Punto de Información Cultura de Gran Vía
las entradas para asistir al concierto de La Shica, quien
actuará el día 19, a las 21.00 horas, en el Teatro Auditorio
del Revellín. El precio de las localidades es único: cinco
euros, según informan desde Cultura.
La Shica, nombre artístico de la ceutí Elsa Rovayo,
compartirá ‘Supercop’ con sus paisanos, el segundo y último
trabajo de una persona a la que inquietan interrogantes
como: “¿Hasta dónde podrá dar de sí nuestra música? ¿Puede
evolucionar? ¿O está condenada a vivir estancada en el
pasado?” De ahí sus intenciones de recuperar, romper y
transformar tradición folklórica dando rienda suelta a su
cabeza, en la que eso se mezcla con otros estilos y ritmos
que nada tienen que ver con lo anterior. “El problema es que
mi cerebro carece de separadores o compartimentos estancos
donde guardartoda esta información y así, sin buscarlo, se
mezcla en mi cabeza un cante grande, como puede ser el
Taranto, con un tema del último disco de Matthew Herbet”,
explica.
Ganadora del Premio de la Música 2011 a la Artista
Revelación y al Autor Revelación, ha seducido a público
nacional e internacional con sus dos discos (‘Trabajito de
chinos’, de 2008; y ‘Supercop’, de 2010), con colaboraciones
de lujo y con una sorprendente puesta en escena en la que
danza y cante forman un todo difícil de catalogar y fácil de
disfrutar.
Flamenco y copla, hip-hop, rap, rock, funk y hasta bossa
nova dan forma al deseo de La Shica de encontrar su propio
sonido, un deseo que comparte desde el escenario con un
lenguaje atípico marcado por el baile flamenco, el cante
limpio y una estética modernista.
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