Un agente del CNP recibió en la madrugada de ayer tres
puñaladas de un individuo que intentaba robar en el ambigú
de las cabañas Miguel de Luque. El policía, de paisano,
intentó detenerle pero el sujeto forcejeó con él y después
huyó al monte. Veinte minutos después, ya se había
desplegado en la zona un dispositivo de coordinación para
buscar al ladrón, que fue arrestado entre las zarzas por dos
policías nacionales sobre las 8.45 horas. El herido se
encuentra estable.
Un agente del Cuerpo Nacional de Policía recibió en la
madrugada de ayer tres puñaladas de un individuo que
intentaba robar en el ambigú de las cabañas del complejo
rural Miguel de Luque. Sobre las 6.00 horas, este policía,
de unos 50 años de edad y que reside en una de las cabañas,
fue alertado de que se estaba produciendo mucho jaleo en la
zona del bar habilitado después del incendio producido hace
unos meses en el restaurante Miguel de Luque. Cuando salió
se encontró con el sujeto, que portaba un “cuchillo de
grandes dimensiones”, según informaron fuentes cercanas al
suceso.
El agente, que iba de paisano, fue atacado y apuñalado en
primer lugar en las costillas; después, el individuo intentó
asestarle otra puñalada en el cuello pero el policía
consiguió parar el arma con la mano. A pesar de ello,
recibió otra puñalada en el cuello. Otro agente, que también
se encontraba allí, salió al lugar de los hechos con la
pistola para intentar detener al hombre, que en ese mismo
instante huyó al monte. El policía herido fue atendido por
su compañero y momentos después ya se encontraba en el lugar
una cincuentena de miembros de la Policía Nacional, la
Guardia Civil y la Policía Local. El operativo de rastreo y
búsqueda del individuo se puso en marcha a las 6:20 horas,
bajo la coordinación de uno de los mandos de la Policía
Nacional.
Los agentes cooperaron llevando a cabo diferentes batidas en
la oscuridad para encontrar a un individuo que era
“corpulento y alto”. El aviso lo dio uno de los familiares
de una trabajadora de las cabañas, que había observado “una
figura sin camiseta entre la maleza”. De esta manera, el
grupo se puso manos a la obra y dos fueron los agentes del
CNP que se ofrecieron a intentar atrapar al hombre. A unos
cincuenta metros de donde se encontraba el grupo, los dos
agentes comenzaron a observar restos de ropa enganchada en
las zarzas y también sangre.
Detención, a sangre fría
En unos minutos encontraron al individuo, que se resistió a
acompañarles e incluso les amenazó con el cuchillo con el
que había atacado a su compañero. Tras colocarse los
chalecos antibalas, los agentes se abalanzaron sobre el
sujeto y lograron reducirle. Tuvieron que llevarle ‘en
volandas’ hasta donde estaba montado el operativo. Cuando
llegaron al lugar, según testigos presenciales, los
compañeros, tanto de CNP como de Guardia Civil y Policía
Local, comenzaron a aplaudir a los agentes. El operativo
finalizó con la detención del individuo a las 8.45 horas.
Incluso el delegado del Gobierno, Francisco Antonio González
Pérez, destacó y agradeció personalmente a los agentes la
labor realizada en la mañana de ayer.
El agente herido fue trasladado al Hospital Universitario,
donde se le intervino, ya que llevaba una herida en el
cuello “muy cerca” de la vena aorta. Sin embargo, su vida no
corre peligro. El individuo fue llevado a las dependencias
de la Comisaría para ser puesto a disposición judicial.
Testigos afirman que llevaba dos días alojado en las cabañas
y que había “indicios” de que era un hombre “problemático”
por un suceso en el que se vio implicado en el Poblado
Marinero.
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