PortadaCorreoForoChatMultimediaServiciosBuscarCeuta



PORTADA DE HOY

Actualidad
Política
Sucesos
Economia
Sociedad
Cultura
Melilla

Opinión
Archivo
Especiales

 

 

sucesos - VIERNES, 7 DE SEPTIEMBRE DE 2012


intervención de una de las forenses. reduan.

juicio
 

Los forenses aportan el ‘ojo
clínico’ al juicio entre la UIR y ‘Almacenes Susi’

Los médicos coinciden en que “no pueden determinar” la causa de las lesiones del propietario del almacén, si bien las mismas no fueron producidas por “un roce o una caída”
 

CEUTA
Cristina Rojo

ceuta
@elpueblodeceuta.com

El juicio por las denuncias cruzadas de atentado y lesiones entre el propietario de ‘Almacenes Susi’ y su hijo, y cuatro miembros de la UIR, continuó ayer en su tercera sesión. Los únicos en prestar declaración fueron los médicos y forenses que atendieron a las partes tras el suceso, acaecido en mayo de 2010. Los especialistas, que aportaron el “ojo clínico” e independiente, coincidieron en su apreciación de que la lesión en el ojo del propietario, Mohamed Embarek, no fue producto de “un roce” o “una caída”, si bien no pudieron determinar con qué objeto se produjo, ni si cierta medicación que tomaba (antigoagulante) pudo agravar el efecto del golpe.

Aunque comenzó con algo de retraso debido a problemas técnicos para establecer contacto con el primero de los testigos en comparecer ayer en la Audiencia Provincial, la tercera sesión del juicio por la actuación de los agentes de la UIR en ‘Almacenes Susi’ en 2010 se desarrolló ayer con normalidad. Una vez escuchados los testimonios del dueño del almacén y su hijo, así como los agentes de la UIR implicados y otros testigos a lo largo de las dos sesiones previas, quedaba ayer el turno de los especialistas médicos que debían determinar la gravedad de las lesiones denunciadas en su día por Mohamed Embarek y su hijo, así como uno de los miembros de la Policía, A.F.J.G.

La primera de las especialistas en declarar fue la forense del Hospital Universitario de Ceuta, Cristina Mochales. A las preguntas del letrado Fernando Rodríguez Quirós, Mochales concluyó que la lesión que presentaba en el ojo el dueño del almacén, Mohamed Embarek, se produjo con un objeto romo “bien un puñetazo o un objeto como una porra”, ya que un objeto afilado “habría producido una herida”. Cómo se realizó el golpe es algo que no pudo determinar, como tampoco si el hecho de que el comerciante estuviera medicado con ‘Sintrón’ pudo agravar la repercusión de sus hematomas, al ser este medicamento un anticoagulante. Finalmente la forense concluyó que el hematoma del ojo podría haber sido fruto de un puñetazo “pero de escasa intensidad”. Por otra parte, el hematoma que presentaba el denunciante y denunciado en la parte interior del muslo es a su entender “difícilmente compatible” con una caída, puesto que la contusión se habría reflejado entonces en la zona externa de la pierna.

Poco después declaraba la doctora Shiham Haddou, que atendió a Embarek en Urgencias el 6 de mayo de 2010. La doctora estuvo de acuerdo con su compañera en que la medicación que tomaba el empresario podría haber afectado a la envergadura de los hematomas qe presentaba, aunque dejó claro que “el importante tamaño de los hematomas, con posible rotura fibrilar no lo produce el ‘Sintrón’, como intentó inducir el letrado de la UIR. “Los hematomas no los produce una enfermedad, aunque el hecho de que tome un anticoagulante puede hacer que tenga hematomas con más facilidad”, explicó Haddou. “No soy forense, pero un hematoma en un ojo no es un roce. No puedo determinar a qué se debe, pero sí que fue un gran golpe, jamás un roce”, afirmó.

Así, el alcance de las lesiones que presentaba Mohamed Embarek, con una contusión en el hombro derecho, además del hematoma periorbital (en todo la zona) en el ojo con contusión interna, la lesión en su muslo derecho y las erosiones y arañazos que presentaba en general centraron prácticamente toda la sesión. En cuanto al origen de las lesiones de su hijo, de carácter “leve”, los especialistas tampoco pudieron determinar el origen de las mismas, si bien las heridas fueron consideradas “superficiales” . “Posibles son muchas cosas, pero yo no puedo decir la intensidad del golpe sino sus consecuencias, o lo que se ve desde fuera”, afirmó el doctor Max Garuus del Hospital Universitario.

Del mismo modo concluyó la especialista que atendió al agente de la UIR A.F.J.G, quien aunque no pudo verificar el origen golpe que presentaba en su hombro izquierdo, afirmó que “es difícil llegar con una patada al hombro o antebrazo”.

A la espera de que declare un último testigo, que no se presentó a la segunda sesión del juicio ni compareció ayer, el Magistrado titular levantó la sesión y convocó a las partes para continuar el procedimiento el próximo jueves 27 de septiembre.
 

Imprimir noticia 

Volver
 

 

Portada | Mapa del web | Redacción | Publicidad | Contacto