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Nueva jornada de juicios en la sala de vistas de lo Penal.
Un ciudadano alemán se confirmó con una pena de prisión,
aunque alegó atenuante de drogodependencia para haber
cometido un delito contra la salud pública. En todo caso,
tratará de poder cumplir la pena impuesta, de más de tres
años, en una cárcel alemana. Todo ello se verá
posteriormente, en el proceso de ejecución de sentencia.
Un ciudadano alemán ha sido condenado a tres años y un día
de cárcel después de que fuera hallado en posesión de 2,650
kilogramos de hachís. Trataba de cruzar el Estrecho en
dirección a la península portando la droga, aunque fue
descubierto.
La vista oral se celebró ayer en la sala de juicios de los
juzgados de lo Penal, en la segunda planta del edificio
Ceuta Center. El hombre irá a prisión, pero por muy poco
margen, ya que la cantidad límite que se admite que no
causaría pena de cárcel, sino multa y antecedentes penales
es de 2,5 kilogramos. Esto es, por sólo 150 gramos de más,
irá a la cárcel.
El acusado aceptó la pena, que es menor de la que en
principio solicitaba la Fiscalía. Normalmente, en los casos
en los que los acusados confirman su culpabilidad, la pena
se reduce y eso se traduce en un beneficio para ellos, ya
que además la multa que se les impone puede ser sustituida
por tres días de prisión en caso de no tener dinero para
satisfacerla o bienes embargables. En caso contrario puede
extenderse hasta 180 días.
El hombre alegó, a través de su abogado, que se le aplicara
el atenuante de drogodependencia.
En todo caso, pedirá cumplir la pena en una cárcel alemana,
para estar más cerca de sus allegados. Lo más probable es
que esta cuestión sea resuelta favorablemente, ya en la fase
de ejecución de sentencia. El acusado estuvo asistido de una
intérprete de alemán.
También se dirimió ayer un caso de malos tratos en el ámbito
familiar, si bien como viene siendo ya habitual, la cuestión
quedó en nada.
En efecto, ya es prácticamente una tradición que en la fase
de la vista oral de los casos, la parte acusadora recapacite
y retire la denuncia. El procedimiento es sencillo: ambas
partes se ponen previamente de acuerdo y en el momento de la
vista oral se niegan a declarar, por instrucción de sus
abogados, siempre que la parte acusadora decida dar marcha
atrás, lógicamente.
Así, ayer se pedía una orden de alejamiento y una multa de
720 euros para un hombre por el citado delito de malos
tratos. Finalmente, como no se efectuaron declaraciones por
las dos partes se entendió que no había carga probatoria del
delito, por lo cual impera el término de “in dubio pro reo”,
que significa que en caso de que haya una duda razonable, el
juez se pronuncia a favor del acusado.
Así, el hombre fue absuelto, por lo que quedó en libertad y
con pronunciamientos favorables.
La sala de lo Penal también acogió la vista contra Omar A.,
que fue condenado a tres años y nueve meses de prisión, así
como a una multa de 11.738 euros después de que fuera
hallado en posesión de algo más de tres kilogramos de
hachís, que pretendía introducir en la península. La pena es
algo mayor de lo habitual en estos casos debido a que se
produce el agravante de reincidencia.
También fue condenado a tres años y un día de prisión
Mohamed M., que fue hallado en posesión de aproximadamente
ocho kilogramos de hachís. Se trata de un hombre sin
antecedentes, de 48 años de edad. También fue sancionado con
una multa de unos 12.000 euros, aunque si no puede pagarlos
tendrá que cumplir otros tres días más de cárcel.
Un caso particular fue el de Luis G.R., quien fue hallado en
posesión de una pequeña cantidad de droga. El joven, muy
cortés y respetuoso en la sala, fue condenado a un año,
nueve meses y diez días de prisión, así como a una multa de
2.234 euros.
El acusado, que admitió los cargos que se le imputan, dijo
que no tiene dinero, pero que su familia se había prestado a
ayudarle en el pago de la sanción económica. El magistrado
decidió finalmente que podía satisfacer la multa en varios
plazos.
Teniendo en cuenta de que el joven no tiene antecedentes, no
irá a prisión, aunque deberá andar con cuidado de no cometer
ningún delito durante los próximos dos años, porque entonces
sí iría a la cárcel.
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sentencia
