La Secretaría de Política Social del PSOE ha presentado
veinte enmiendas al reglamento de alojamiento alternativo
presentado en el último Pleno de la Asamblea. Considera que
esta normativa dificulta el acceso a las ayudas, ya que las
personas que aspiran a ellas no pueden tener alquileres de
más de 700 euros.
La Secretaría de Política Social del PSOE ha dado a conocer,
ayer en rueda de prensa, las veinte enmiendas que ha
presentado al reglamento de alojamiento alternativo,
aprobado de manera provisional en el último Pleno de la
Asamblea. El secretario del área, Pablo Núñez, ha criticado
que la normativa “no innova mucho”.
“No sólo sigue la línea tradicional, sino que además
dificulta el acceso a las ayudas, ya que las personas que
aspiran a ellas no pueden tener alquileres que superen los
700 euros mensuales, teniendo en cuenta las condiciones del
mercado inmobiliario que se dan en nuestra ciudad, sino que
también limita la aportación máxima a recibir por parte de
los usuarios a 300 euros”, ha manifestado el socialista.
En esa línea ha hecho referencia a como, “según fuentes de
la Ciudad”, está actualmente la situación. “El programa de
alojamiento alternativo es la prestación social más
importante que se está dando a la ciudadanía”, apunta. “Hay
casi 1.200 personas, 383 unidades familiares que reciben una
ayuda al alquiler”, ha agregado, avisando de que existe una
lista de espera sobre la que pedirán “datos más fiables” en
una interpelación que realizarán en el próximo pleno.
Además, ha informado de que actualmente viven 20 personas en
dos albergues de la ciudad y de que el gasto mensual desde
enero hasta la fecha de es de 148.488 euros mensuales en
este servicio. “Según el informe de intervención, el
presupuesto inicial, que ascendía a 800.000 euros, ya ha
sido desbordado en 90.926,69 euros”, agregó.
En su discurso, Núñez ha pedido que estas ayudas se den “en
tiempo y forma” y ha hecho referencia a “diversos retrasos
que dificultan los contratos entre usuarios y arrendadores”.
Un refuerzo del asesoramiento integral es otra de las
alegaciones que el PSOE presentaron el martes. Desde el
partido han recordado que estas ayudas no deben mantenerse
en el tiempo, sino aportar soluciones al respecto.
Núñez ha rechazado también la Comisión de valoración porque,
según ha explicado, este organismo “excluye a la oposición”.
“Si entendemos que este tipo de organismo es de carácter
técnico, no sabemos por qué figura la consejera como
presidenta de esta comisión; el valor que le da el
reglamento a esta comisión es de tal magnitud que es capaz
de eliminar algunos de los requisitos que establece el
reglamento para tener acceso a estas ayudas”, criticó Núñez.
Intervención social
Entre las enmiendas también figura dar una mayor importancia
al programa de intervención social. “Queremos resaltar que
este tipo de prestación es un servicio y no una ayuda o
subvención, y por lo tanto los usuarios deben comprometerse
a poner todos los medios a su alcance para que desarrollen
habilidades sociales y económicas encaminadas al objetivo
primordial que debe tener este reglamento, que es la
normalización, que los usuarios no dependan de una ayuda
para poder tener acceso a una vivienda.
El PSOE ha revisado también los aspectos vinculados a la
igualdad de género y ha solicitado una mayor protección
social. En ese sentido, piden una bolsa de alquiler a la que
se inviten a los propietarios de viviendas a cambio de una
serie de garantías como seguros ante situaciones de incobro.
“Proponemos también una auténtica red de infraestructuras
para el alojamiento de urgencia, ya que no hay nada regulado
en la materia”, apuntan y proponen convenios con las cadenas
hoteleras.
El PSOE también incide en la recuperación de un albergue
para el alojamiento alternativo urgente. “Está construido
pero se ha priorizado en otras infraestructuras como la
Manzana del Revellín o el Plan Aparca; el alojamiento debe
ser una prestación esencial en todos los ámbitos”, concluyó.
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