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La actual tarifa del taxi, aprobada en diciembre, trae de
cabeza a los trabajadores del sector. Según un estudio
realizado por la Asociación de Autónomos del Taxi el coste
de la carrera mínima les conlleva unas pérdidas de entre 10
y 15 euros diarios, por ello los representantes del sector
esperan que se produzca una nueva modificación para el
próximo año.
La tarifa del taxi, que se actualizó después de cuatro años
congelada el pasado mes de diciembre, está funcionando mal y
así lo trasladan los taxistas desde que se puso en marcha.
Su presidente, José Reyes, explica que el error de este
cambio se encuentra en que el taxímetro “salta más tarde”
por lo que al final la carrera le sale más cara al taxista.
“No es viable volver a la tarifa anterior, porque a nosotros
nos ha subido todo, la gasolina, el aceite...” manifiesta
Reyes para constatar que la situación en el sector es
especialmente dura. Ahora están esperando para realizar una
nueva modificación a principios de 2013. La responsable de
transporte, Adela Nieto, ha mantenido varias reuniones con
los representantes de los taxistas para buscar una solución.
“Se vería lo que ha subido el IPC y se subirá en consonancia
a ese aumento”, espera Reyes que aclara: “En el caso de que
se produzca la subida, el contribuidor no la va a notar
porque lo único que va a pasar es que saltará un poco antes
el contador, por lo que la persona que hace un trayecto
corto va a seguir pagando 3,30 euros, mientras que el que
realice un trayecto largo le va a suponer 10 ó 15 céntimos”.
Sin embargo, los taxistas están perdiendo con la actual
tarifa entre 10 y 15 euros diarios, según un estudio que han
realizado. “Para el taxi que está trabajando todo el día, a
diez céntimos por carrera, supone mínimo diez euros de
pérdida al día que al mes se traducen en 300 euros”, lamenta
Reyes.
“Mucha gente cree que el taxi es una caja de hacer dinero,
pero es una herramienta que está todo el día trabajando y
que sufre desperfectos”, recuerda el presidente de los
autónomos del taxi para señalar que los taxistas pasan
revisión cada seis meses, sobre todo ahora que la Ciudad ha
intensificado los controles. El objetivo compartido por
ambos lados es dar un buen servicio y la mejor imagen, eso
sí, sin perder dinero.
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