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Es evidente que en épocas de
“vacas flacas” los ajustes van a salpicar a todo y a todos.
También a esos Planes de Empleo que nacieron con un objetivo
bien definido y no para “colocar” ya que ni las Autonomías,
ni los Ayuntamientos ni el propio Gobierno Central son
empresas de empleo temporal, ni estamos en un Estado
“asistencialista” sino en una economía liberal donde son las
grandes empresas, las pymes y los autónomos los auténticos
motores de la economía y quienes han de generar empleo. Con
fundamento.
La sostenibilidad de una ciudad no puede basarse en la
creación de una especie de “empleos ficticios” para tratar
de parchear las carencias de los desempleados. Los planes,
por el contrario, opino que deben ser mucho más ambiciosos,
productivos, arriesgados, imaginativos y con perspectivas de
futuro. De ahí que me parezca extremadamente frívola la
postura de una oposición que representa al partido político
que nos legó cinco millones de parados por su ignorancia y
estulticia, a la hora de “criticar” ¿Con qué cojones de
fuerza moral puede permitirse la crítica? Mejor aportar
soluciones y los dedos duelen en este periódico de teclear
clamando porque, al igual que hacen en la Junta de Andalucía
y en el Gobierno Autónomo de Extremadura en coordinación con
las grandes centrales sindicales, oposición y sindicatos de
Ceuta “sean mínimamente capaces” de lograr, como logran
andaluces y extremeños, buenos y jugosos contratos de
trabajo para que contingentes de parados ceutíes tengan la
suerte y la oportunidad de viajar a las campañas agrícolas
de Francia, tanto a la manzana cómo a la vendimia
paralelamente a cientos de miles de temporeros españoles, a
veces familias enteras, que se desplazan para irse a vivir
cinco o seis meses en barracones, pero que vuelven con un
buen puñado de miles de euros ganados con el sudor de su
frente y produciendo a tope, con lo que tiran el resto del
año.
¿Y ustedes conocen el significado exacto del culto término
lingüístico que es “apollardaos”? Ahora lo pueden aplicar a
la oposición y a los sindicatos de Ceuta que no saben ni por
donde les da el aire mientras que en otras Autonomías los
sindicatos se parten el culo por conseguir ofertas laborales
para “su gente” ¿Es que no tienen derecho los parados de
Ceuta de formar parte de los contingentes que ganan buenos
dineros en la fresa de Huelva? ¡Porque miren que se ganan
dineros en Lepe! Y ya no contratan a extranjeros sino a
parados nacionales, al igual que en el olivo de Jaen y en la
fruta del levante. Trabajo para los extranjeros ya no hay,
pero el paro del ladrillo ha desembocado en el campo y los
padres, las madres y los hijos, se lanzan por esas
carreteras de Dios buscando el jornal y ganando honradamente
los dineros por cuenta de las empresas que les contratan
para “la recogía”. Nadie le regala nada al jornalero. Ni
“le” colocan. Sindicatos y Gobiernos que no están
apollardáos, se mueven como lagartijas para obtener
contrataciones y que la gente tenga un contrato en
condiciones, para un trabajo duro que van a hacer de manera
productiva (de lo contrario se van a la puta calle) y por
ese trabajo de sol a sol van a percibir un buen sueldo, como
es lo justo y lo cabal. Extraña por lo tanto y mucho que
jamás nadie haya movido un dedo por brindar esa estupenda
expectativa laboral a nuestros parados de Ceuta. Me responda
Vivas el por qué los desempleados de Ceuta se tienen que
conformar con el plan de empleo nada más.
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OPINIÓN / ANALISIS
