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OPINIÓN - JUEVES, 9 DE AGOSTO DE 2012

 
OPINIÓN / EDITORIAL

Una difícil aplicación de la normativa

Entre las medidas para evitar la sangría del sistema nacional de salud a causa del fraude que suponen casos como el denominado ‘turismo médico’, el Gobierno se propone limitar también la atención a inmigrantes irregulares. En principio, la medida parece necesaria, dado que la ‘caja’ pública, tiene unos límites, pero choca con el concepto de sanidad “universal” de la que tanto se ha presumido en España y en otros países europeos. “Universal” no obstante, no puede significar “ilimitado”, aunque sólo sea porque es una utopía pensar que un sistema de sanidad público puede soportar la atención a nacionales y a todos los extranjeros sin límite alguno. No obstante, se debe procurar que la responsabilidad de aplicar el cambio normativo no recaiga en los profesionales sanitarios, cuya deontología obliga a atender a quien lo necesita sin distinción.
 

Feria de cinco días: formato óptimo

Resulta que la crisis tiene a veces una cara “positiva”, pues descubre otras formas de gestión de lo público que a la postre, resultan mejores que las empleadas en época de ‘vacas gordas’. Eso es precisamente lo que parece haber ocurrido en el caso de las fiestas patronales ceutíes, que siguiendo el modelo de otras ciudades, se han acortado a la mitad en relación a lo que venía siendo habitual en los últimos tiempos. Para los responsables de la Ciudad, y en vista de los resultados de la Feria 2012, la de ‘los cinco días’, la fórmula ha sido un éxito, por lo que proyectan mantenerla en próximas ediciones. La asistencia ha sido ”masiva” y los empresarios se han ido contentos, dicen. Pues dicho queda, sólo queda por tanto repetir.
 

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