Recuerdan las Operaciones Paso del
Estrecho de hace varios años cuando las colas de vehículos
llegaban desde Algeciras hasta Estepona y la gente salía de
los chalets para ofrecer agua a los viajeros que esperaban
horas y horas para poder llegar al embarque? De hecho en un
periodo relativamente breve la situación se ha dado la
vuelta como un calcetín y ya absolutamente nada “es lo que
era”.
Ni son tan frecuentes en las carreteras los coches
sobrecargados y con siete ocupantes que hacían
Bruselas-Algeciras sin parar y a borde del agotamiento. En
primer lugar y tras muchas protestas de los conductores que
veían un riesgo en los coches con exceso evidente de
equipaje y que “además” nunca eran multados, en la Jonquera
se estableció un pesaje y el que excede tiene que dejar la
carga en unas naves. Así se evitan riesgos al volante. Luego
las carreteras fueron sustituidas por caras autopistas de
peaje con áreas de servicio feísimas y también a precios
prohibitivos. Lo que viene a decir que la fea funcionalidad
del progreso cutre ha venido a cargarse el espíritu
entrañable de las antiguas ventitas a pie de carretera donde
te servían un lomo en manteca y una zurrapa que eran la
bendición de Dios y todo eso con pan cateto.
Pero eso nada tiene que ver con la OPE, lo que sí tiene que
ver es la opción de muchas familias de contratar portes
internacionales que son camiones cargados hasta la bandera,
para transportar regalos y equipajes y los viajeros
prefieren embarcar en un cómodo vuelo low cost hasta Tanger,
Rabat o Casablanca y así se ahorran la “matadera” de los
miles de kilómetros y el gasto de los peajes y la gasolina.
¿Y esas serán las causas por las que el paso de vehículos
por el puerto de Ceuta ha descendido según nos informa el
director general de protección Civil? Supongo que en parte.
Porque teniendo a la vera la suntuosidad del puerto Tanger-Med
con sus toldos para que los pasajeros estén frescos a la
sombrita mientras esperan embarcar y los detalles de las
instalaciones marroquíes donde en Ramadam a quienes llegan
al oscuro les reciben con dátiles y todo tipo de detalles,
malamente podemos competir. Tanger-Med es una dura
competencia y al parecer los precios desde Algeciras hasta
allí ofrecen descuentos, bonificaciones y demás mientras que
de Algeciras a Ceuta con coche el trayecto resulta caro,
nadie espera a los viajeros con dátiles y encima cuando van
a embarcar están a la puta solana porque en la explanada
donde tienen que permanecer los coches hay plantados cuatro
árboles raquíticos en lugar de buenos ficus que se ponen
enseguida frondosos y dan una agradable sombra.
El único que trata de aliviar semejante cutrerío agobiante
es el dueño del chiringuito que ha tratado de hacer un
jardín que tiene muy cuidado en el escaso espacio del que
dispone. ¿Y los wáteres del embarque? Sucios no están, es la
verdad. Pero no tienen papel higiénico, ni toallas de papel
para las manos, ni espejos y además quitando un par el resto
son boquetes en el suelo ¿Y de cuando y de donde los
europeos meamos en boquetes en el suelo? ¿Quienes se creen
que somos, salvajes? Poco detalle la verdad.
Y un puesto de trabajo desaprovechado porque una señora
encargada de los servicios que reciba propinas a cambio de
tenerlo todo como los chorros del oro es al tiempo
oportunidad laboral y calidad para los usuarios. ¿Y están
este año mejor las cosas? Regular.
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