Toca la renovación del DNI y desde
aquí y desde ya quiero agradecer, en nombre de mÍ esposa y
en el mío propio, las atenciones que hemos recibidos por
parte de la funcionaria encargada de hacer los mismos,
compañera de escenario en algunas ocasiones, como de los
componentes del CNP que se encontraban de servicio en la
puerta de comisaría.
Fueron tantas las atenciones y el trato exquisito recibido,
que no cabe otra palabra para decir lo que siento de
corazón, en nombre de los dos, que la única que reúne todos
los condicionantes, GRACIAS.
Una vez dicho esto, vamos a Cataluña y al problema de los
catalanes. Esa Cataluña que en varias ocasiones he escrito,
cuando renunciaban a España y querían su independencia, que
si esa llegaba en Cataluña crecería la hierba por sus
calles. La voracidad sin límite de nacionalistas e
independentistas les llevaría a ello.
Precisamente, cuando se cumplen 20 años de los JJ. OO en
Barcelona, aprueban en el Parlament que a efectos fiscales,
Cataluña pretende desvincularse del resto de España, sin
acordarse de que esos JJ. OO fueron financiados gracias a la
aportación de todos los españoles y cuyas infraestructuras
siguen disfrutando los catalanes.
Y es curioso que esto se lleve a efecto, cuando apenas han
pasado 24 horas desde que Cataluña anunciara que va a pedir
su rescate ante la imposibilidad de hace frente a sus
obligaciones de pago. Unos pagos entre los que se encuentran
las nominas de los funcionarios, entre los que se encuentran
más de 4.000 médicos que se pueden quedar sin cobrar
Hospitales que se cierran, líneas aéreas que no funcionan
funcionarios que dependen del rescate para poder cobrar sus
nominas. Una deuda que se inicia con el tripartito y que
continúa con la desastrosa gestión de Arturo Más que han
llevado a Cataluña a que esa deuda alcance los 42.000
millones de euros.
Una vez más, y no se cuántas van, porque son incontables,
“mamá España”, esa que reniegan de ella, volverá a acudir en
ayuda de Cataluña porque, en definitiva, es una parte de
España para salvarles los muebles.
Si España, con el dinero de todos los españoles, no acude en
esa ayuda, se podría cumplir aquello de que en sus calles,
gracias a la desastrosa actuación de nacionalistas e
independentistas, crecería la hierba.
Lo más gracioso del asunto es la afirmación de Arturo Mas
que “nadie venga de fuera a mandar en la Generalitat”. Nadie
va a venir de fuera, esto es España te guste o te deje de
gustar, y lo menos que puedes hacer, es darle gracias a
“mamá España” por acudir en tu ayuda, apuntalando una serie
de disparates, como son las embajadas, que sólo favorecen
las fantasmadas del nacionalismo catalán.
Usted, señor Mas, fracasado político, puede pensar y hacer
lo que quiera pero, al menos, sea solidario, como el resto
de los españoles, los somos con ese trozo de tierra
española, que es Cataluña.
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