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La Consejería de Fomento ha suspendido las actuaciones de
ejecución de demoliciones de obras ilegales al menos hasta
que pase el mes de Ramadán. La consejera Susana Román señala
al respecto que dado que los trabajos se apoyan básicamente
en personal de Obimace y que muchos de sus trabajadores son
musulmanes practicantes se ha considerado conveniente
esperar a que finalice el mes de ayuno para retomar estas
labores.
Entre tanto, la consejera asegura que el área de Disciplina
Urbanística continúa con la tramitación administrativa de
expedientes y redacción de proyectos de derribo para
“después del verano” retomar las órdenes de ejecución de las
obras ilegales.
Por el momento, y desde que el pasado mes de abril se
anunciaran medidas conjuntas de la Ciudad y la Delegación
del Gobierno para atajar la ocupación de terrenos públicos y
las construcciones ilegales, sólo se ha logrado el derribo
de unos muros, un kiosco y un ático.
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urbanismo
