La Jefatura Superior de Policía
Nacional ha decidido zanjar las “informaciones” y
“comentarios” sobre la reyerta que se produjo el pasado día
4 en la barriada de Los Rosales. Un hecho que se saldó con
dos agentes heridos a causa del ataque de alguno de los
vecinos de la zona, que no todos. Ahora las imágenes de las
cámaras de vídeo de la Comisaría de Los Rosales -esas que
algunos residentes tanto criticaban en otro medio de
comunicación que no funcionaban-, están en manos del juez.
Pero, para evitar especulaciones, el CNP ha hecho bien
porque su cometido es servir a la ciudadanía y no
“atacarla”. La Policía trabaja para velar por el bien de
todos y no hay que olvidarlo. Cuando acuden a un suceso o a
una reyerta, como fue en este caso, es para apaciguar los
ánimos, no para caldearlos más.
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