La Operación Paso del estrecho que se vienen desarrollando
con total normalidad, según las fuentes consultadas por este
periódico, sí vienen confirmando en esta anualidad la
tendencia observada en los últimos tres años: un descenso
progresivo del nivel de pasajeros y vehículos en el tránsito
que se produce por el puerto de Ceuta.
La situación puede estar motivada por la crisis económica y
la competencia que suscitan los vuelos baratos con ofertas
atractivas desde sus países de orígen, principalmente
Bélgica hasta el aeropuerto de Tánger, lo que indica -según
los observadores-, que se viene marcando una tendencia a la
baja que, aunque lenta sí es progresiva en el tránsito
terrestre hasta el país de destino de este contingente:
Marruecos.
Quienes conocen el sector estiman que aún bajaran los
niveles de tránsito desde el puerto de Algeciras al de Ceuta
y de éste aquél, en los próximos años en un momento también
complicado para las navieras y el mantenimiento de sus
servicios, ya que han de asumir los costes derivados del
precio del combustible, un hecho que, en muchos casos,
suelen repercutir en el billete con la incidencia negativa
para el usuario y la consiguiente incidencia negativa que
ello supone de cara al consumo.
La situación económica implica una reordenación de los
planteamientos, tanto para las navieras como también para el
usuario e, incluso, para Puertos del Estado, sobre sus
tarifas aplicadas a las compañías marítimas por la
consecuencia final que conlleva de “asfixiar” al sector y
provocar un efecto dominó mucho más grave.
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