Por el momento está fuera de la circulación y a buen recaudo
en la cárcel de Los Rosales un delincuente reincidente
especializado en robos con fuerza. Ayer fue juzgado y
condenado por uno de los delitos que supuestamente ha
perpetrado, aunque le esperan al menos seis causas más,
cuyas posibles penas de cárcel podrían sumarse a los dos
años a los que fue condenado ayer.
Mohamed A. es su nombre real, pero aparece relacionado con
numerosos delitos de robo con fuerza en los que ha utilizado
hasta 24 nombres falsos facilitados a la policía y a los
juzgados.
Ayer fue condenado también como reincidente en el juzgado de
lo Penal número 1 a dos años de prisión por un robo con
fuerza perpetrado el 26 de enero de 2011 en un
establecimiento comercial, Olympic, situado en la calle
Real. El individuo fue declarado culpable de haber forzado
la persiana de cierre del establecimiento y de haberse
apoderado de 40 euros que se encontraban en la caja
registradora. Precisamente allí dejó sus huellas dactilares,
un hecho que fue determinante para su identificación y
posterior captura.
También deberá indemnizar al propietario del establecimiento
con 40 euros y a pagarle los daños producidos en el cierre
del establecimiento, cuantía que se determinará en la fase
de ejecución de la sentencia.
Pero Mohamed A. tiene muchos más delitos a sus espaldas y al
menos seis causas más que tendrán que llegar a juicio, por
lo que las penas que pudieran serle impuestas se irían
acumulando. Se le considera el autor de un robo en la
cafetería Apolo, en establecimientos del Coso de Hadú, en
una perfumería, y hasta en la sede del partido UDC, de donde
al parecer sustrajo diverso material informático.
Este hombre, reincidente, es de baja estatura y pequeña
complexión. Su obsesión parece ser el robo con fuerza en las
cosas y el peligro de que vuelva a cometer de nuevo este
tipo de delito es más que posible, dadas los antecedentes
con los que cuenta y su comportamiento. En ocasiones ha
actuado también con otros cómplices.
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