Eduardo y María José, José Antonio y Toñi, y Javi y Pili,
son las tres parejas de aventureros ceutíes, que han querido
‘unir dos continentes’ a través de un viaje mítico dentro
del mundo motero como es viajar hasta Cabo Norte. El viaje
está siendo muy duro debido al viento y la lluvia, pero el
pasado sábado vieron cumplidos sus sueños al llegar al
destino fijado.
Hablar de Cabo Norte (Nordkapp), es hablar de un mito dentro
del mundo motero, es el viaje, la aventura, la épica.
Después de años de moteros sufriendo por llegar, Cabo Norte
ha perdido su épica aventurera y se ha convertido en un
largo viaje por Europa, duro por su extensión, pero
maravilloso por lo que significa, y por la sublimación de
los sentidos que implican esos paisajes aún vírgenes y
recónditos.
Tal y como adelantó EL PUEBLO, desde el pasado día 6, tres
parejas ceutíes, Eduardo y María José, José Antonio y Toñi,
y Javi y Pili, iniciaron esta emocionante aventura después
de más de un año de preparativos. El pasado sábado, llegaron
al ansiado Cabo Norte donde permanecerán unos días hasta que
emprendan el viaje de vuelta.
El viaje no ha sido nada fácil, ya que desde Irún la lluvia
ha sido una compañera más de viaje, y les ha acompañado
durante más de cinco mil kilómetros. Pese a todo, calados
hasta los huesos, castañeando los dientes, con la ropa y el
equipaje empapados, y a tan sólo dos grados, las tres
intrépidas parejas han conseguido su objetivo y no podían
ocultar ayer su alegría y satisfacción por haber cumplido
este “sueño motero”.
Aunque el cuerpo se resiente debido a la lluvia y a los
kilómetros que llevan encima, no dudaron en desplazarse
hasta la emblemática escultura que marca el Cabo Norte para
disfrutar de uno de los espectáculos más impresionantes que
sólo se puede contemplar desde dicha zona como es ‘el sol de
media noche’.
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