Apenas ha culminado la primera quincena del mes de julio y
los vecinos de la barriada de Benítez han comenzado ya a
sentirse incómodos con los efectos que los recortes en el
mantenimiento de las playas está produciendo en su calidad
de vida. Así lo denunciaban ayer algunos residentes de la
zona, apenados por encontrarse una playa “con cuatro
sombrillas mal puestas”, sin red antimedusas y, lo más
importante, con servicio de socorristas solo los fines de
semana, a diferencia del año pasado, cuando contaban con
socorristas a diario. “Mira como la playa donde vive el
presidente sí tiene todos los días”, se quejan los vecinos,
aludiendo a la playa de La Ribera, donde sí hay vigilancia
diaria de Cruz Roja. En total se ha pasado de una plantilla
de 23 personas que en 2011 trabajaban de lunes a domingo, a
veinte que operan únicamente los festivos y fines de semana
repartidos en las playas de Benítez (ocho), Miramar y
Tarajal (seis personas cada una).
El presidente de la barriada, Juan Moreno, denuncia además
que el servicio de limpieza deja mucho que desear en estos
momentos, pasando de ser diario a únicamente dos días por
semana, lunes y viernes, aunque “también es verdad que la
suciedad la dejamos nosotros. La playa se llena todas las
tardes”.
“Ya me he quejado porque es necesario que la máquina pase
más a menudo y bata la tierra, que vengan limpiadores sin
máquina no vale porque todo se queda ahí, enterrado debajo
de la arena y empiezan a salir mosquitos”. Moreno aclara que
aunque en estos momentos acuden dos personas a diario y tres
o cuatro los fines de semana, “sin tractor”, no se pueden
realizar las labores de aplanar y estirar la arena
necesarias en una zona con grandes rachas de viento y
oleaje. “Sí disponemos de policía, que está allí todos los
días a partir de la una de la tarde”, opina el presidente,
que se muestra satisfecho a este respecto. En cuanto a la
necesidad de una red de medusas, el presidente de la
barriada estima que si bien de vez en cuando aparecen
‘aguavivas’ en la playa, no cree necesario que se instale
una red, “ese dinero mejor que lo inviertan en socorristas”,
opina. Por otro lado, critica que en estos momentos la playa
cuenta con menos sombrillas de lo habitual, siendo además
estas de mala calidad. “Son antiguas, las sacudes y sale
mucha suciedad”, dice, esperando que Gregorio García
Castañeda, responsable de Medio Ambiente, Servicios
Comunitarios y Barriadas, cumpla con su compromiso de
aumentar su número. Casteñada por su parte afirma que “si
hacen falta más sombrillas se pondrán”, aunque ha confirmado
que todas las que hay son nuevas, “es el mismo modelo
exactamente en todas las playas y se coloca el número
estipulado, pero si los vecinos estiman que necesitan más,
se colocarán dentro de las posibilidades”. En cuanto a la
limpieza, el consejero afirma que la máquina pasa tres veces
por semana por la playa, “lo que consideran suficiente”,
además del personal de limpieza que se persona allí a
diario. “Es necesario que los vecinos colaboren manteniendo
limpia la playa”, ha recordado el consejero, apelando a la
colaboración vecinal para el mantenimiento de las playas.
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