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Caballas criticó ayer la postura del Gobierno local por
“negarse” a devolver al Pleno de la Asamblea la
fiscalización de los contratos, como ha sido el caso de la
licitación del pliego de limpieza viaria. Según explicó
Mohamed Alí, este tipo de pliego supondrá un coste de “más
de 300 millones de euros” para la Administración local en
los próximos 20 años. “La propuesta que se elevará al Pleno
en la próxima sesión es que todos los grupos parlamentarios
participen” en la creación de este tipo de contratos”,
resaltó el portavoz del partido localista. Por su parte, el
diputado por Caballas Juan Luis Aróstegui, recordó que,
desde la época del GIL en el poder, el servicio de limpieza
“nunca ha terminado de adecuarse”. Para Aróstegui el
documento de prescripciones técnicas es una “chapuza” y
“está inspirado en que las cosas sigan como están”. “Parece
que el concurso pasa desapercibido y que se hará todo de la
misma manera”, continuó el diputado de Caballas.
Aróstegui consideró que “no es el mejor momento” para sacar
un contrato de estas características cuando la Ciudad debe
desde el mes de enero a Urbaser un total de 10 millones de
euros. El diputado se preguntó cómo se va a contratar a una
nueva empresa cuando la que es adjudicataria ahora del
servicio todavía espera un pago que “no está previsto que se
cumpla”, ya que “todos sabemos que la Ciudad no tiene dinero
para hacerlo”, aseveró.
Por otro lado, Aróstegui se refirió a la unificación de los
contratos de limpieza viaria y recogida de residuos,
contenerización y recogida de residuos animales (SANDACH) en
un único contrato. “No se han analizado ni tratado estas
uniones”, aseveró. En relación a la empresa que se encarga
en la actualidad de la gestión de los residuos animales,
Athisa, Aróstegui fue claro: “El servicio que se presta es
en precario y llevan seis meses sin cobrar”. Recordó que lo
necesario es la instalación de un horno incinerador, algo
que habría que “regularizar” y recordó que en 2008 ya se
comenzaron a trasladar estos restos animales a la península.
En relación a Contenur, “se ha incorporado al pliego la
misma concesión” que en el anterior contrato. “Sólo se ha
sumado sin mayor criterio ni aspiración; tampoco se recoge
la incorporación de nuevo material”, así que “los
contenedores que hay ahora, excepto los de recogida
selectiva, serán los mismos que hasta ahora, pero con 20
años más si se prorroga el servicio”, resaltó.
En última instancia, el diputado se refirió a la limpieza y
recogida, donde considera que también “hay un retroceso”.
“No se ha atendido de forma adecuada en muchas zonas pero
hay que buscar las soluciones adecuadas”, en relación a las
barriadas que tienen “calles más estrechas” y con las que
habría que “utilizar maquinaria mucho más pequeña”.
Reducción de rutas
“Era el momento de equilibrar el servicio de limpieza y nada
se ha hecho”, destacó. “Las rutas de recogida se han
disminuido y es un deterioro del servicio”. En definitiva,
Caballas afirma que “se han puesto 16 millones de euros, lo
que supone una hipoteca para le futuro y en estos momentos,
el servicio funciona a un nivel no muy aceptable”. Además de
“rebajar el coste, el proceso errático de la adjudicación va
a provocar un debate público sobre qué servicio de limpieza
queremos”. “Es una situación inaceptable”, sentenció
Aróstegui.
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