El sindicato Unión Federal de la Policía (UFP) defiende “a
ultranza” las intervenciones llevadas a cabo el jueves y el
viernes de la pasada semana en las barriadas de Los Rosales
y del Príncipe, respectivamente. UFP denuncia asimismo la
“mediatización tendenciosa” de estos sucesos en otro medio
de comunicación escrito que recogía que la reyerta del
primer día era una pelea de “chiquillos”.
La UFP trasladó a los integrantes del Cuerpo Nacional de
Policía de Ceuta su “más incondicional apoyo” en relación a
estas intervenciones que buscan “garantizar la seguridad
ciudadana y proteger los derechos y libertades de los
ciudadanos”. El sindicato traslada asimismo a los ceutíes un
mensaje de “tranquilidad y seguridad”, ya que tal como
explica, “los agentes de la Policía de Ceuta no se han
tirado a la calle a las armas ni pretenden detener y agredir
a cualquier ceutí que se encuentre en la calle, sino que
desarrolla su labor desde las garantías constitucionales”.
Respecto a estas dos actuaciones -en las que resultaron
heridos dos agentes, uno de ellos, en ambas-, UFP aclara que
se estaba atendiendo a requerimiento ciudadano, en la
primera, la de los Rosales, “a una llamada por una reyerta
en vía pública”. “En efecto, se trataba de una pelea de
menores de la que los propios policías toman conocimiento
cuando llegan al lugar, pero que para la policía no deja de
ser una reyerta o riña como se tipifica en el Código Penal,
por lo que, por supuesto, está fundamentada la toma de datos
y filiación de los participantes, ya que si una persona
participa en un hecho delictivo deberá ser identificada para
dar cuenta a la Autoridad Judicial, y no porque al agente de
turno quiera hacer valer su uniforme, placa o cualquier
apelativo peyorativo que nos quieran poner”, indican.
Este hecho parece ser, según UFP, “el desencadenante del
conflicto y las agresiones posteriores, ya que los adultos
no comparten, no conocen o no entienden estas leyes”. “Para
finalizar -continúa- aparece en la escena una persona que es
reconocida por los agentes por encontrarse en situación de
reclamación judicial”. “Por razones obvias los Policías
deben proceder a la detención de esta persona, si esta
acción sumada a la crispación de un numerosísimo grupo de
ciudadanos allí congregados da lugar a empujones y
altercados”.
UFP cree necesario explicar asimismo que los agentes de
policía “no pueden sufrir empujones y menos aún utilizarse
estas agresiones para evitar la detención de una persona,
porque se puede estar produciendo un delito tipificado que
guardaría relación con el Atentado a los Agentes de la
Autoridad o la Resistencia o Desobediencia, según sea
calificado por la Autoridad Judicial y la Fiscalía”.
Sobre lo ocurrido en el Príncipe desde el sindicato se
“aplaude” a los ciudadanos de la barriada que se atrevieron
“a enfrentarse a los autores de un robo de un vehículo que
posteriormente empotraron contra otros cuatro que sufrieron
daños”. No obstante apuntan que una vez finalizada la
intervención de los agentes, que conllevó la detención de
uno de los autores del robo del coche, estos se vieron
“sacudidos por una lluvia de piedras y hasta por la agresión
física a un agente que tuvo que recibir asistencia médica y
quedar ingresado”.
UFP aclara que se caracteriza, tanto en Ceuta como en el
ámbito nacional, por posturas reivindicativas “serias,
profesionales y desde el fundamento de la coherencia, con la
discreción necesaria y sin entrar en debates o conflictos
banales”, si bien en este caso se ha visto obligado a enviar
esta nota de prensa “no sólo para apoyar el trabajo de los
policías, sino también para denunciar “la mediatización del
asunto, realizada de forma tendenciosa”.
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El sindicato explica cómo se traslada en barco a los
inmigrantes
Por otro lado, UFP respondió ayer
a un artículo publicado en el otro diario de la ciudad que
hacía mención, indica, a que “los sindicatos policiales no
denunciaban la situación del traslado de inmigrantes en el
barco”. “Este sindicato en concreto no denuncia esta
situación -explica en su nota- porque los ciudadanos
extranjeros que carecen de documentación válida y en vigor
para viajar y permanecer en España, es decir, que se
encuentran de forma ilegal, cuando son trasladados de la
península a Ceuta o viceversa, lo hacen en el barco de la
compañía Acciona, en cuyos buques existe una zona acotada,
con televisión incluso, donde se acomodan los detenidos, por
orden judicial o gubernativa, para que realicen el viaje,
claro está con la pertinente custodia policial, que se
encarga de realizar este servicio con gran sutileza y
discreción para evitar que se creen situaciones de
inseguridad ciudadana entre el resto del pasaje”.
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