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En efecto, en el día primero de
julio en plena Operación Paso del Estrecho una jornada que
tuvo todas las características de la improvisación. Y ello
pese a la buena organización del puerto de Algeciras que
estaba sobradamente preparado para la avalancha pero... Por
el tema del precio de los billetes y las buenas ofertas los
que van de vacaciones a Marruecos prefieren Tanger-Med que
además tiene toldos para paliar los calores de los
automovilistas. Pero el problema surgió en la cola para
viajar a las 15 horas con Balearia, allí se sucedieron las
quejas y una señora jubilada preguntaba si era normal pagar
39 euros por el vieja tan solo de venida a Ceuta, mientras
que otros pasajeros reclamaban con furor la hoja de
reclamaciones. ¿Y para qué s lo peor estaba por llegar?
Retraso injustificado, eran las 15,25 y seguían entrando
pasajeros de las 15 horas a la sala de embarque sin que
hubiera una segunda azafata dando la entrada, solamente
estaba la que se encuentra en el interior de la pecera y
ante las quejas alegaba carencia de personal. Tuvo que
acercarse una pasajera y anunciar que los estaba denunciando
a este diario para que apareciera la segunda señorita y el
pasaje, agotado y furioso consiguiera embarcar con 45
minutos de retraso. Y en el barco de Algeciras a Ceuta no
había oberbooking ni iba hasta la bandera de pasajeros, es
más parecía que tardaban para que llegara más gente, cómo en
los autobuses de pueblo que salen cuando están llenos. Mal
reclamo para el turismo porque de lo que se trata es que
esta ciudad sea capaz de atraer con ofertas ventajosas a
visitantes y veraneantes que vengan a gastar aquí el dinero,
de la OPE no viven las navieras porque esas son fechas muy
puntuales y repito, Tanger-Med es una durísima competencia a
nivel instalaciones y más que nada a nivel ofertas para los
viajeros. Mal comienzo para la temporada veraniega y
vacacional afirmo, firmo y ratifico. Cuando más facilidades
deberían dar con más jodiendas e inconvenientes se encuentra
la gente hasta el punto de que es más rentable para embarcar
con coche ir hasta Tanger y de allí a Algeciras o viceversa.
Los retrasos y los precios disuaden a quienes piensan que
venir a esta ciudad es una agradable excursión que
cualquiera se puede permitir, porque no lo es, es una
excursión muy cara y tampoco había ayer en Algeciras una
situación caótica en las instalaciones, largas colas para
quienes querían viajar con vehículo que siempre es más
laborioso, pero casi, casi, normal en el resto. 40 euros un
billete para un jubilado por un trayecto de 45 minutos es
una barbaridad aquí y en cualquier punto de España y muchos
opinamos que las navieras ya están muy bien subvencionadas
cómo para que estrujen más a quienes no tienen más remedio
que depender de un barco para viajar a la Península, porque
eso no es una “gracieta” sino un gran fastidio ¡Qué no
daríamos por tener el túnel del Estrecho similar al de la
Mancha! Con su buen tren y todo comodidades y no estar
dependiendo de los trucos, los caprichos y las conchabanzas
de las compañías. Domingo 1 de julio aciago para quienes
viajaron a Ceuta, nervios en quienes esperaban la llegada
del barco, teléfonos sonando sin cesar “a ver que pasa”
ninguna explicación del retraso por megafonía por cierto
¿Hay megafonía? Porque en Ceuta la gente pasa cuando los
policías abren la puerta, si no la abren porque se ha
quedado atascada lo mismo no pasa nadie. ¿Y la tarde del
domingo? ¿No iba a estar la ciudad comercialmente abierta?
Nada, Zara, Tous y cuatro más y encima sin taxis a partir de
una hora por la cercanía del partido, la única animación la
ponían las rojigualdas en los balcones y los ceutíes
vestidos de la Roja para ir a animar a España con gran
profusión de efectos sonoros que casan con los eventos
deportivos. ¿Que se chinchen las navieras! Caras y
retrasadas, pero Ceuta lucía el domingo cómo el mismísimo
sol llena de banderas y entusiasmo.
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OPINIÓN / ANALISIS
