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El Gobierno ha informado de que durante las dos avalanchas
masivas de inmigrantes que intentó saltar la doble valla que
separa Melilla con Marruecos entraron un total de 48
indocumentados, entre ellos 18 jóvenes “supuestamente
menores”, y no tres como se dijo en un principio. Por tal
motivo, el Gobierno de Melilla dijo ayer que es necesario
que Marruecos preste su colaboración “máxima” para que la
presión migratoria que está padeciendo la ciudad se reduzca.
El Gobierno de Melilla dijo ayer que es necesario que
Marruecos preste su colaboración “máxima” para que la
presión migratoria que está padeciendo la ciudad se reduzca.
A preguntas de los periodistas, el vicepresidente primero
del Ejecutivo melillense, Miguel Marín, ha dicho que el
fenómeno de la inmigración, pese a no ser de su competencia,
es una cuestión que preocupa a la Administración autonómica,
de ahí que haya ofrecido su ayuda al Gobierno central en lo
que sea necesario.
Sin embargo, Marín ha considerado que lo fundamental contra
los asaltos de inmigrantes es que Marruecos preste su
colaboración, ya que ha quedado demostrado que, cuando lo
hace, la presión migratoria desciende.
Desde el pasado viernes, un total de 48 inmigrantes han
conseguido entrar en dos asaltos masivos, protagonizados por
alrededor de un centenar de subsaharianos en cada caso.
El Gobierno ha informado de que durante las dos avalanchas
masivas de inmigrantes que intentó saltar la doble valla que
separa Melilla con Marruecos entraron un total de 48
indocumentados, entre ellos 18 jóvenes “supuestamente
menores”, y no tres como se dijo en un principio.
Según ha comunicado este lunes una portavoz, el primer
intento de asalto masivo a la frontera por parte de un grupo
superior al centenar de inmigrantes, según cálculos de la
Guardia Civil, una vez constatados los hechos, “se registró
poco antes de las cinco de la madrugada del pasado viernes,
en la zona próxima al paso fronterizo de Barrio Chino”.
Así ha detallado que el asalto, “realizado con fuerza y
contundencia por parte del numeroso grupo”, se saldó
finalmente con la entrada en la ciudad, de forma irregular,
de un total de 46 subsaharianos, entre los que se incluyen
18 jóvenes, supuestamente menores de edad.
Asimismo, ha destacado que el modus operandi de los
inmigrantes conllevó que 18 de ellos sufrieran lesiones de
carácter leve por las que fueron atendidos por los Servicios
de Urgencias y dados de alta tras practicárseles las
correspondientes curas, en su mayoría heridas en las palmas
de las manos.
Además, en la misma defensa de la frontera de Melilla, tres
guardias civiles sufrieron lesiones de carácter leve. El
segundo intento de asalto realizado por un grupo menos
numeroso, pero próximo al centenar, se registró en la
madrugada del sábado, prácticamente a la misma hora y mismo
lugar que el día anterior, si bien en esta ocasión tan sólo
lograron acceder a territorio nacional dos inmigrantes.
“La eficaz coordinación de los efectivos de la Guardia Civil
y sus denodados esfuerzos por controlar nuestras fronteras,
impidieron que los asaltos a la valla se saldaran con la
entrada de un número mayor de inmigrantes” ha indicado la
portavoz gubernamental.
La Delegación del Gobierno ha felicitado a la Comandancia de
la Guardia Civil de Melilla “por su intensa labor de control
y defensa de nuestra frontera”, y ha asegurado que
“garantiza su escrupuloso respeto a la legalidad vigente en
todas sus actuaciones, al tiempo que rechaza las versiones
de algunos sectores, absolutamente contrarias a los informes
que maneja esta Delegación del Gobierno” relativa a la
“expulsión sumaria” a Marruecos por parte de sin papeles
realizada por la ONG Pro Derecho de la Infancia (Prodein).
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