PortadaCorreoForoChatMultimediaServiciosBuscarCeuta



PORTADA DE HOY

Actualidad
Política
Sucesos
Economia
Sociedad
Cultura
Melilla

Opinión
Archivo
Especiales  

 

 

OPINIÓN - VIERNES, 1 DE JUNIO DE 2012

 
OPINIÓN / ANALISIS

La burda estrategia del “Pajarito”

Por Nuria de Madariaga


Cada movimiento en la causa que, impecablemente instruida por el Juzgado nº 5, fue en su día incoada por el cruel asesinato del miembro de las Brigadas Cívicas, Karim Mohamed, supone para su familia revivir con aún mayor intensidad la agonía que están padeciendo. Y más aún cuando uno de los imputados, el Pajarito, decide solicitar ser oído de nuevo en declaración (y van...), procuradores y abogados han de ser citados, el traslado desde Cáceres comunicado a Instituciones Penitenciarias, todo un despliegue y un inevitable gasto para la Administración Pública, desde el furgón a la escolta policial, todo es dinero. ¿Y con que fin? Para que el individuo llegue a sentarse ante el Instructor ante la expectación de las partes que ignoran cuales son sus intenciones para limitarse a manifestar que no quiere declarar y volver a su melodía habitual de “que recibe amenazas”.

Nunca ha podido probar ni presentar una milésima de indicio de que alguien le haya amenazado, pero no ceja en su empeño de hacer perder el tiempo y de tomarle el pelo a la Justicia ¿Y para qué? ¿Para ver si ahora se retrasa el traslado y le dejan un tiempo en Ceuta donde estará cerca de su familia y podrá seguir denunciando sus fantasmagóricas amenazas? ¿Son tal vez estrategias dilatorias del procedimiento o simples tentativas de cumplir su voluntad de permanecer preventivo en Ceuta? Si es así es que no conoce al nuevo director de Los Rosales ni conoce la imposibilidad manifiesta de tratar de manipular a un director que sabe más que los ratones coloráos y que está más que bregado en tratar con “elementos”.

Pero ya no se trata de la burla a la Justicia y del desprecio manifiesto al dolor de la esposa, los hijos y la familia de Karim Mohamed, sino de que la postura es cruel. Y cuando “denuncia” amenazas que es su ocupación favorita, humilla y ofende aún más a la familia Mohamed porque ellos, los familiares directo del joven asesinado, sí han sido objeto de gravísimas amenazas por parte del entorno “del de siempre” y fue la hermana de la viuda la que tuvo que ir a denunciar, aterrorizada, ante la Policía, la que insistió para que detuvieran a los autores de esas amenazas (por cierto al ser detenidos iban pertrechados con armas blancas) y la que tuvo que presenciar con desesperación junto a la viuda de Karim y sus hijos huérfanos, cómo el Juez nº 3 ponía en libertad a unos individuos sin tener en cuenta el riesgo de reiteración delictiva, sin atender su peligrosidad manifiesta, sin darle importancia a que eran amenazas de un mal inminente, grave e injusto y el miedo que habían provocado.

Y es la primera vez en 32 años de ejercicio profesional en las que he presenciado cómo unas amenazas graves contra la familia de una víctima de asesinato se cerraba con un “juicio de faltas” y los autores se iban de rositas. Les juro que no se trata de una anécdota ni de una leyenda urbana, tampoco es un chascarrillo de mal gusto criticando la Justicia, lo que les digo es real. Las amenazas de muerte contra la familia del desafortunado Karim Mohamed que en cualquier otro lugar habrían enviado directamente a sus autores a prisión, en Ceuta son “faltas” poco más o menos cómo decirle a una vecina “¡Te he de arrastrar de los pelos, cacho de guarra!”.

Dolor sobre dolor y humillación sobre humillación. ¿Y que es más lacerante para la viuda y los huérfanos de ese hombre bueno que fue Karim Mohamed? ¿Que el Pajarito se cachondee de la Justicia, o que la Justicia, poniendo en libertad a quienes hacen peligrar sus vidas se cachondee de ellos?.

La viuda preguntado “¿Que ha declarado, que ha declarado?” Y la respuesta “Nada de declaración, ha sido una burla”. Cuando el cuerpo sin vida de Karim, podría decirse que “aún está caliente” porque no ha pasado todavía un año desde el día en que tres malnacidos le arrebataron el futuro a él, a su mujer, a sus hijos y a los vecinos del Príncipe.
 

Imprimir noticia 

Volver
 

 

Portada | Mapa del web | Redacción | Publicidad | Contacto