El Murallas de Ceuta disputará este domingo su último
partido de la temporada, en el que estará en juego nada
menos que su continuidad en la categoría. Consciente de que
no depende de sí mismo para conseguir la permanencia, el
equipo intenta buscar en las matemáticas a su mejor aliado.
A pesar de ello, estas tampoco acompañan demasiado, y del
casi medio centenar de posibilidades que podrían darse entre
los seis equipos que pelean por no terminar descendidos, al
cuadro ceutí sólo les valdría unas quince. Aun así, el
equipo caballa se aferra a la victoria frente al San Roque y
a los resultados de sus rivales directos para conseguir la
salvación.
El importante número de equipos que pelean por las tres
últimas plazas de la zona de permanencia, y lo ajustado de
las puntuaciones, hace que un triple -e, incluso, un
cuádruple- empate sea más que posible. En este caso, el
Murallas tendría mucho que ganar siempre y cuando el Arcos
no entrase en dicho empate. Y es que los ceutíes tienen
ganado el gol average particular a todos sus rivales
directos a excepción del Ayamonte, con el que lo tiene
empatado (aunque le tiene ganado el general, por lo que le
seguiría valiendo), y del Arcos, con el que sí lo tiene
perdido.
Los seis puntos a favor del Arcos podrían hacerle mucho daño
a un combinado caballa que no consiguió puntuar frente a
este rival, y que por tanto tendría mucho que perder. Así,
el Murallas no descarta como una de sus mejores opciones que
el Arcos ganase su partido, con lo que no entraría en un
hipotético triple empate.
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