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En efecto, ningún personaje guarda
más analogía con los dos líderes de Coalición Caballas, me
refiero a analogía alternativa ya que en realidad comparten
características con dos de los personajes del cuento
infantil, por una parte con “Pepito Grillo” que ejercía de
“voz de la conciencia” y por otro con el entrañable muñeco
“Pinocho” al que le crecía su nariz de madera cuando decía
mentiras.
Con relación al papel de “voz de la conciencia” se evidencia
en que, cuando convocan una rueda de prensa todo en ella es
pura arenga o “llamamiento” en esta ocasión manejando cifras
para tratar de demostrar la insanía económica que ha
provocado la gestión del Gobierno de Juan Vivas. Todo puro
catastrofismo apocalíptico en su afán de versionar y
“pinochear” la realidad.
Hablan de que estamos en un “crack” económico y piden que
“se depuren responsabilidades políticas en todos aquellos
casos en los que se ha llevado una gestión nefasta”. Una
idea que todos compartimos ya que es muy doloroso que el
anterior Gobierno socialista arruinara la economía española,
sea ejemplo de nefasta gestión cómo “tema estrella” de las
elecciones en Francia y se vaya “de rositas”. Por ahora
porque mucho han de cambiar las leyes en cuanto a las
responsabilidades de los políticos, al estilo finlandés y
mucho ha de cambiar también el principio de irretroactividad
de la ley penal para que las nuevas normas se puedan aplicar
a quienes ayer la piciaron.
Pero no. Las fulminaciones de Alí y de Aróstegui se ciñen
como siempre a su minúsculo localismo y a despotricar contra
el Partido Popular, algo que no impresiona mucho, por
cierto, a los ciudadanos que conforman la mayoría absoluta
de ese Partido Popular. El hecho de que Aróstegui acuse al
Gobierno de “hacer trampas con la contabilidad” es ya de por
sí una acusación grave porque ¿Cómo se pueden hacer trampas
contables si no es falseando los datos? ¿Imputa acaso el de
Caballas al Gobierno un delito de falsedad? Bien claras ha
de tener las cifras y abundante debe ser la documentación
que maneja cuando se permite alegar acusaciones calumniosas
que sólo son admisibles si existe la “exceptio veritatis” la
excepción de la verdad. ¿Y cuando alega lo de “es una
oportunidad de conocer las malas artes que han estado
utilizando, estafando a unos, engañando a los empresarios y
a la ciudadanía”?
¿Y contra quienes ha perpetrado “exactamente” el Gobierno de
Juan Vivas un delito de estafa? Porque las víctimas han de
tener nombre y apellidos más datos de filiación o razón
social caso de no ser persona física sino jurídica. No se
trata de usar y abusar de lengua viperina, sino de hacerlo
cuando existen pruebas plenas y cumplidas, que viene a ser
echarle cojones a una acusación pero teniendo esos mismos
órganos genitales bien forrados con una sólida prueba
documental, lo que jurídicamente se denominaría “cojones
documentados” y en Derecho Romano “testiculum documentatus”
según la acepción latina.
Pero, latinajos aparte, hay que ser un cerril Pepito Grillo
cuando, entre la vorágine de imputaciones de distinto calado
y calibre se acusa al Gobierno de haber rechazado facturas
de proveedores por tener “defecto de forma o estar fuera de
plazo” y a estos requisitos ineludibles los denominan
“argumentos de carácter técnico para no pagar” lo que viene
a demostrar:
1º.Que la ignorancia es muy osada.
2º.Que Caballas sobrevive porque sus pinochadas son
ignoradas a todos los niveles. Normal.
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OPINIÓN / ANALISIS
