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El consejero de Educación, Antonio Miranda y la hermana
Isabel Becerra, directora de la Divina Infantita firmaron
ayer un convenio de colaboración por el que la Ciudad
abonará 100.000 euros para disponer de 20 plazas para niños
de 2 a 3 años en el centro. Ayer también se firmó un
convenio similar con las religiosas de María Inmaculada para
sufragar 30 plazas de su escuela infantil,.
La Consejería de Educacióni y la guardería Divina Infantita
renovaron ayer el convenio para disponer de 20 plazas para
niños de 2 y 3 años en el centro. La Ciudad abonará por ello
100.000 euros.
Recordó el consejero que lo que se firmaba era la prórroga
del convenio de colaboración que desde hace años mantiene la
Ciudad con las Religiosas Esclavas de la Inmaculada Niña, la
institución que gestiona años el centro de la Divina
Infantita. Miranda agradeció a la congregación “el trabajo
que desarrollan, por eso cualquier convenio que se firme con
ellas es positivo porque repercute en los que más lo
necesitan”.
En concreto, el acuerdo señala que la Ciudad dispondrá de 20
de las 80 plazas que cuenta la escuela infantil de Divina
Infantita, en concreto, son plazas para niños de entre 2 y 3
años. La Ciudad se compromete a abonar cien mil euros a las
Religiosas, dinero que se destinará al mantenimiento del
centro y al personal, que está compuesto por 1 maestro de
Infantil, 5 educadores infantiles, técnicos superiores, dos
asistentes de guarderías y limpiadora.
Por su parte la hermana Isabel Becerra, directora de la
Divina Infantita e integrante la Congregación de las
Religiosas Esclavas de la Inmaculada Niña, agradeció a la
Consejería de Educación de la Ciudad la renovación del
acuerdo, porque de esta forma se contribuye al mantenimiento
del centro y a la labor que allí se lleva a cabo.
“Nos satisface ver la confianza que han depositado en
nosotras”., señaló
Apuntó que los fundadores de la orden en 1923, querían crear
un asilo para niños y niñas musulmanes, pero “no se vio
oportuno porque se podría crear la falsa idea de que lo que
se buscaba era convertir a estos pequeños; por ese motivo se
creó sólo un parvulario mixto y un centro para chicas que
siguen aún en marcha”. Añadió que la escuela cuenta con 80
plazas, y que la residencia atiende a 28 niñas y
adolescentes de entre 5 y 18 años, con la ayuda de Bienestar
Social.
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